Ciudad de México.- En el último trimestre del 2018, las exportaciones, el consumo y las inversiones se desaceleraron, al tiempo que se registró un retroceso en las actividades industriales, dijo Chiquiar Cikurel.
La desaceleración económica registrada a finales del 2018 en el país, podría prolongarse en la primera parte de este año, advirtió el Banco de México. Asimismo, el director de Investigación Económica del banco central, Daniel Chiquiar Cikurel, refirió que la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), en Texcoco, impactó negativamente en el crecimiento económico, sobre todo en la industria de la construcción.
Sostuvo que “la cancelación del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, sí tuvo un efecto en la actividad productiva y no está muy difícil de identificar —dijo— si se observa que hubo una caída en la producción, directamente asociada con el proyecto del aeropuerto en la industria de la construcción en la región centro del país.
“Hay datos de esa industria que soportan la idea de que hubo una caída en la producción de esa industria asociada con el aeropuerto, sin embargo, ahorita no tenemos un número preciso, que esté basado en datos reales”.
El director de Investigación económica del banco central, señaló que en el último trimestre del año pasado, las exportaciones, el consumo y las inversiones se desaceleraron, al tiempo que se registró un retroceso en las actividades industriales, mientras que las del campo y los servicios presentaron reactivación.
El consumo se desaceleró a finales del año pasado, pero de niveles muy altos, por lo que no se puede pensar que hay un problema de falta de consumo duradero, hubo una desaceleración pero en la medida que vaya progresando la economía y los programas sociales que están en marcha puede haber cambios en esa trayectoria.
Sostuvo que el problema de suministro de gasolinas que se registró a principios de este año, no afectó los precios de los bienes en las diferentes regiones del país, al tiempo de que empresarios encuestados señalaron que no tuvieron ningún tipo de afectación en sus actividades, por esta causa, sobre todo aquellos que se ubican en las regiones norte y centro del país.
El comportamiento de la economía en el último trimestre del año pasado, dijo, para el caso de la región sur, registró una contracción, mientras en el norte y centro norte hubo un estancamiento, ello explicado debido a una caída de la mayoría de los sectores productivos, excepto el turismo, que registró cierta recuperación hacia el cierre de año, luego de que había registrado cierta debilidad en el tercer trimestre.
En el tema de inseguridad que se vive en el país, Chiquiar Cirukel precisó que empresarios siguen esperando una expansión en sus niveles de actividad, tanto en el sector manufacturero y no manufactureros, así como un crecimiento en la demanda, aunque sus expectativas son más débiles que las observadas el trimestre previo, con excepción del centro norte, donde se fortaleció.
Los empresarios coincidieron en que los mayores riesgos para la actividad económica regional, se relacionan con un deterioro en la inseguridad pública, aunque, la encuesta se levantó en enero pasado, cuando todavía no se conocía, dijo, todas las acciones que se han implementado por parte del gobierno federal, y por tanto, no pudieron ser evaluadas.
Otra preocupación por parte de los directivos de empresarios se relaciona con la posibilidad de que ocurran nuevos eventos que provoquen el desabasto de combustibles, o que se pudieran registrar nuevamente conflictos como el bloqueo a las vías férreas, como ocurrió en Michoacán.