Ciudad de México .- La nueva lógica para construir ciudades apunta hacia la renta y reciclaje de vivienda, y a esquemas de financiamiento de vivienda popular y social otorgados por entidades privadas, así concluyó el Foro Vivir El Centro, organizado por la asociación civil Mejor Ciudad.
Durante su participación en el foro, la coordinadora general de la ACH, Dunia Ludlow Deloya manifestó que hay muchos paradigmas que necesitan romperse, pues está demostrado que la preservación del patrimonio y la habitabilidad pueden convivir con equilibrio, y que la vivienda en renta es una opción para lograr ciudades conectadas y compactas.
“Los únicos esquemas de financiamiento para poder llegar a vivienda de interés social y popular no necesariamente tienen que ser dados por el Estado, tiene que haber otros esquemas de financiamiento que deben explorarse para que se pueda llegar con esto a mucha más población”, enfatizó Ludlow Deloya.
Al respecto, el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Armando Díaz-Infante, comentó que existen mecanismos para financiar vivienda de bajo costo llamados fideicomiso de inversión en vivienda social, los cuales fueron elaborados con la Academia de Ingeniería y la Facultad de Ingeniería de la UNAM, y que están enfocados a los trabajadores que no cuentan con seguridad social.
De los 55 millones de personas económicamente activas en 2018, 20 millones estaban afiliadas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y 4 millones en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
De acuerdo con la CMIC, la vivienda en renta está teniendo mucha demanda y se estima que del 16 por ciento de vivienda que actualmente se encuentra en renta, pase a los próximos 20 años a 35 por ciento.
“Las personas requieren cada más flexibilidad para mudarse, entonces nos vimos en la necesidad de crear esquemas novedosos de vivienda en renta con opción a compra en las principales ciudades del país, pero que sea una renta movible con derechos adquiridos para revertir la propiedad en un plazo, a través de un fideicomiso de bienes raíces que uno vaya acumulando rentas hasta llegar a 300 rentas -25 años- y no importa donde estés pagando las rentas, al final de esos 25 años uno va a tener el derecho de la reversión de la propiedad donde uno elija”, explicó Díaz-Infante.
Asimismo, se planteó la idea de construir corredores convivienda asequible donde un porcentaje de los desarrollos se destine a vivienda social, que los privados refuercen la infraestructura de drenaje, banquetas y mobiliario urbano donde ejecutan sus desarrollos y que haya regeneración de inmuebles.
Si se logra regenerar la gran cantidad de edificios que hay en el centro, dejando las plantas bajas activas se tendrá una gran oportunidad para que haya vivienda asequible, expusieron los expertos.
Para concluir, la directora ejecutiva de Mejor Ciudad, Carolina Rodríguez, llamó a seguir construyendo diálogos de manera coordinada entre todos los sectores de la sociedad para mejorar el Centro Histórico de la Ciudad de México.
En las próximas semanas, Mejor Ciudad elaborará un documento de conclusiones que entregará a la Autoridad del Centro Histórico para que sean tomadas en cuenta en la construcción de políticas públicas que revitalicen la Ciudad Central de la Ciudad de México.