Ciudad de México.- La probabilidad de que Petróleos Mexicanos (Pemex) logre la meta de producción de 2.69 millones de barriles para 2024 es menor de 5.0 por ciento, ya que podría verse afectada por factores externos, consideró el director general de la Consultoría GMEC, Gonzalo Monroy.
El especialista indicó que la apuesta de Pemex y el gobierno en su conjunto es que la producción va a repuntar en noviembre o diciembre, con lo que podrían “salvar el año”.
Sin embargo, muchas cosas pueden pasar en «el inter», por ejemplo, si la temporada de huracanes es más fuerte y se tienen que cerrar plataformas, se retrasa un equipo de perforación; además si los contratos de servicios quedan vacíos también tendría un impacto.
“El escenario que están mostrando es el escenario más alto, la probabilidad de que esto ocurra es menor del 5.0 por ciento, la realidad es que vamos a terminar con niveles considerablemente más bajos”.
Expuso que la gran apuesta del gobierno es descubrir campos que puedan poner rápidamente a producir, sin embargo, se trata de campos más pequeños, menos complicados, de bajo riesgo geológico, y en el agregado ninguno tiene la capacidad de producir los 100 mil barriles de Zama o Trión en aguas profundas.
“Va a ser la agregación de pequeñas canicas, esperando que sea suficiente. El problema es que va a ser más costoso y no tan barato como lo están planeando, ya que, si bien se van a ahorrar en el costo de desarrollo, el volumen no lo hará atractivo y llegar a una economía de escala por lo que genera una baja rentabilidad».
A decir del directivo, el Plan de Negocios dado a conocer este martes fue solo una “presentación”, ya que el completo es mucho más detallado respecto a los proyectos que Pemex va a desarrollar en sus diferentes líneas de negocio y no tocó temas de refinación, más allá de Dos Bocas, petroquímica, ni logística.
Por lo que, consideró, hacen falta más detalles y habrá que esperar a agosto o septiembre cuando se presente el paquete fiscal para ver los detalles de la reforma de Pemex y hasta entonces podremos evaluar los beneficios de esta ayuda fiscal.
“No hay ningún elemento nuevo, básicamente que Pemex se va a hacer cargo de su producción, traen un plan acelerado para que los campos produzcan lo más rápido posible, pero, por desgracia, en términos de incorporación de reservas no se contiene”.
Para el consultor independiente Ramsés Pech, el plan requiere una definición no solo operativa de producción de crudo, sino demostrar por medio de un balance financiero, con base a ingresos contra el costo, cómo podrá tener una utilidad neta positiva después de la reducción de los derechos y el aumento de flujo de efectivo.
En este contexto, no queda claro cómo alcanzar la producción de 2.4 millones de barriles diarios, considerando una inversión constante para Petróleos Mexicanos entre 380 a 405 mil millones de pesos, añadió.
“Debido a que el costo operativo deberá disminuir al no utilizar personal, activo o infraestructura de la empresa productiva del estado. Ante esto hay una falta de congruencia en la forma de incrementar la producción”.