Claudia E. Anaya (*)
El sector turístico se ha venido caracterizando como uno de los más fructíferos con los que cuenta el país, por lo que ha sido objetivo de las últimas administraciones el fortalecerlo y diversificarlo. Áreas de oportunidad no han faltado, y durante la semana pasada se resaltó una en particular.
De inicio, la Sectur retomó el tema de los tres nuevos puentes vacacionales que se autorizaron a mediados de este año, destacando que estos dejarán una derrama económica de 14 mil 270 millones.
De acuerdo con el titular de la dependencia, Miguel Torruco Marqués, para todas las plazas de vocación turística estos fines de semana darán una derrama equivalente a una Fórmula 1.
Aunado a ello, el número de viajeros que se proyecta para los puentes de septiembre, abril y mayo próximos asciende a los cinco millones, en su mayoría nacionales. “Ese es el tamaño de una decisión que por instrucciones presidenciales se tomó para incentivar el turismo”, indicó el funcionario.
Posteriormente, el mismo Torruco Marqués dio a conocer que la industria de reuniones representa actualmente una derrama anual de 35 mil millones de dólares en México, lo cual equivale al 1.8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
Durante el XXXVI Congreso Nacional de la Industria de Reuniones (CNIR) realizado en Los Cabos, Baja California Sur, el secretario de Turismo indicó que este segmento genera aproximadamente 90 mil empleos y ocupa 30 millones de cuartos-noche al año, cifra que representa el 18.8 por ciento de todos los cuartos ocupados.
Sumado a esto, el titular de la Sectur aseveró que el rubro de reuniones representa 3.1 veces el PIB generado por la suma total de lo producido en conciertos, espectáculos, eventos deportivos y toda actividad recreativa el país, puesto que el viajero de esta industria suele contar con un mayor presupuesto que el de un vacacionista y gasta un 94 por ciento más.
Como hiciera en alguna otra ocasión, el secretario destacó que el impacto de las reuniones trasciende el aspecto económico a corto plazo, ya que ayudan a mejorar en el largo plazo la calidad de vida de las comunidades al importar conocimiento e incorporar programas de responsabilidad social.
Lo anterior “encuadra directamente con la visión que tiene el actual gobierno del turismo, concebido como herramienta de reconciliación social; es decir, que los beneficios de esta actividad permeen en la población local”, según Torruco Marqués.
Otro que estuvo presente en el CNIR fue el diputado federal Luis Alegre, que refrendó el impulso se da a la industria turística desde San Lázaro, con miras a dinamizar la economía mexicana.
Particularmente, el legislador destacó la participación plural de los diputados en la consolidación de leyes para fomentar el turismo, ya que “la finalidad es llegar a consensos y fortalecer la democracia, crear leyes y/o reformar otras que coadyuven al desarrollo del país”.
Abundando a lo dicho por Torruco Marqués en el evento, Alegre señaló que el turismo es un sector estratégico que todos debemos cuidar y fortalecer en sus diferentes segmentos.
Considerando el peso que los mismos funcionarios le han dado a la industria de las reuniones, habrá que ver si se llegan a implementar programas o mecanismos específicos destinados a fortalecer este y otros rubros del turismo que van más allá de los clásicos destinos playeros.
Siguen a la espera de la Sectur en Chetumal
De acuerdo con el dirigente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) de la zona sur de Quintana Roo, Eloy Quintal Jiménez, actualmente las mismas cuatro personas de la Subsecretaría de Planeación y Política Turística se encuentran despachando en una oficina del Centro Internacional de Negocios y Convenciones desde abril pasado.
Quintanal Jiménez destacó que había una gran expectativa por la llegada de la Sectur, pero hasta el momento no ha habido ningún beneficio para la capital del estado y no se ve movimiento ni seguimiento al plan presentado hace unos meses en Chetumal por Miguel Torruco.
De acuerdo con el empresario, en su momento se propuso elaborar un plan de acompañamiento a la descentralización basado en las necesidades paulatinas que fuese demandando el proceso.
Sin embargo, y pese a que el secretario se comprometió con el empresariado a acelerar el proceso de adecuación de la Megaescultura en el bulevar Bahía de Chetumal, hasta el momento no se ha ejecutado nada.
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(*) Directora Adjunta de la Revista Hábitat Mx
