Ciudad de México.- Si bien las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) son la «columna vertebral» de la economía mexicana, la generación de éstas muestra una déficit significativo durante las últimas dos décadas.
«En dos décadas no crecimos nada (en el número de Mipymes)», sostuvo el presidente ejecutivo de la Fundación E, Samuel González Guzmán.
Después de analizar los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), indicó que en 1999 se tenían cuatro millones de esas unidades económicas en el país y en 2018 sumaron cuatro millones 169 mil 677.
El 97.3 por ciento correspondió a microempresas y 2.7 por ciento fueron pequeñas y medinas empresas (pymes), de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Productividad y Competitividad de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (ENAPROCE) 2018.
Aseguró que lo anterior representó un crecimiento de menos 3.0 por ciento durante el periodo analizado, lo cual es aún más grave ante el incremento de 99 millones 706 mil mexicanos a 126 millones 740 mil habitantes en el mismo periodo.
«El déficit (de Mipymes) es enorme», insistió González Guzmán, al enfatizar que esto representa un reto porque estas unidades económicas generan 72 por ciento del empleo y aportan 52 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional.
Consideró que ese estancamiento obedece en parte a la educación, el fomento a la cultura empresarial, la falta de acceso a la tecnología, poca claridad de las convocatorias e incluso a los apoyos destinados por vocación, pues se tienen más apoyos a establecimientos de venta de alcohol que de gastronomía.
«Esto nos habla de que todavía hay mucho camino por recorrer» y es necesario dar un giro de 180 grados desde la Unidad de Desarrollo Productivo (UDP) de la Secretaría de Economía (SE), que este 2019 sustituyó al Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem), apuntó.
Dijo que si bien la UDP mantiene el apoyo de créditos a microempresarios de sectores estratégicos, sobre todo a mujeres y jóvenes, y con condiciones preferenciales, el presupuesto destinado es cada vez menor al de años anteriores.
«Y necesitamos que más pequeñas y medianas empresas tengan la oportunidad de crecer en México y formar nuevas empresas para que la economía se fortalezca”, cuando este año hubo un estancamiento económico, sentenció.
González Guzmán añadió que es necesario buscar la sustentabilidad de las políticas públicas, utilidad de los apoyos y fortalecer el vínculo entre los participantes del sector privado para revertir ese panorama porque, de lo contario, traerá consecuencias sociales y económicas graves para México.
