Ciudad de México.- El empeño es una de las soluciones que usan los mexicanos para enfrentar las deudas en el inicio de año o «cuesta de enero», sólo después de buscar un ingreso extra y usar algún fondo de emergencia o ahorro, por lo que se deben considerar ciertos elementos para evitar ser victimas de fraude en casas de empeño.
De acuerdo con un sondeo realizado por la plataforma de servicios financieros Coru.com., los artículos que los mexicanos empeñan para salir de sus deudas son: joyas (32.2 ciento), televisores (20.2 por ciento), computadoras o tablets (16.6 por cuiento), celulares (14.4 por ciento), relojes (12.6 por ciento) y otros (cuatro por ciento) y los montos que reciben va de los mil a los 10 mil pesos.
Aunque actualmente existen muchas casas de empeño, no todas son justas con sus clientes o no están alineadas a los requisitos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), advirtió Luis Madrigal, director de la plataforma.
Por ello y con el fin de acudir a una institución confiable y regulada, se deben identificar los elementos de que puede tratarse de un fraude, como la promesa de montos elevados por la prenda en garantía, ya que hay un proceso de valoración donde los valuadores otorgan la mitad del costo real del objeto, como máximo.
El que no se expliquen los derechos del cliente que empeña algo, hay que recordar que no es una venta, sino que se deja una prenda para obtener el préstamo. En teoría la prensa se puede recuperar pagando el préstamo y los intereses generados.
Los elementos básicos para identificar una casa de empeño legal son: Número de registro. El contrato de adhesión que otorgue la casa de empeño debe incluir el número de Registro Público de Casas de Empeño otorgado por la Profeco, al igual que la fecha en la que este registro fue autorizado.
Debe mostar información pública y visible, además de que la relacionada con el servicio que prestan debe estar visible y disponible en folleto y/o Internet. En este segmento se incluyen los horarios y días de servicio, límites de préstamos, las prendas aceptadas y el Costo Anual Total (CAT).
También debe existir un contrato pues es la prueba de que la operación efectivamente se realizó; en el documento debe incluirse la descripción de la prenda, cantidad prestada y su porcentaje del avalúo, plazos de pagos, formas de pagos, opciones de refrendo, garantías y su cobertura, y las consecuencias en caso que una de las partes incumpla el contrato.
Incluso, las básculas para pesar objetos como joyas, deben contar con el holograma de calibración reciente. Esto asegura que el peso mostrado es el real y que no están dando menos dinero por la prenda.
Otra de las recomendaciones es conservar siempre la boleta del artículo ya empeñado, y por ningún motivo endosar o traspasarla, ya que si el objeto no se puede recuperar y es vendido, éste es el comprobante para exigir un monto de compensación.
De acuerdo con el INEGI, en el país operan bajo el esquema de empeño más de nueve mil montepíos y casas de empeño. El Nacional Monte de Piedad y Fundación Rafael Dondé son dos empresas de carácter privado que trabajan sin fines de lucro.
