Ciudad de México.- La iniciativa privada, encabezada por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), cocina una reforma al Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR), en la cual el principal ajuste es el aumento de 6.5 a 15 por ciento de la contribución obligatoria de los trabajadores, diferencia que sería absorbida, según la propuesta, por los dueños de las compañías.
Actualmente el trabajador da 6.5 por ciento de su salario de manera mensual a su cuenta individual para el retiro en la Afore. Esta cuota se integra de la aportación del empleado (1.125 por ciento), el patrón (5.15) y el Estado (0.225). Con la adecuación, los dueños de las empresas pondrán 13.65 por ciento del total.
El organismo que está detrás del diseño de esa iniciativa es la Fundación de Estudios Financieros (Fundef). Aunque aún no está terminada, el director del Programa de Investigación Aplicada, Jorge Sánchez Tello, adelantó que otro punto importante será la disminución de mil 250 a 650 semanas de cotización para tener acceso a una pensión, lo que aumentará el número de mexicanos con ese beneficio.
La realidad es que en México el ahorro voluntario ha fracasado, las personas no pueden ahorrar debido a los bajos salarios. Entonces, la IP ha entendido que debe poner su granito de arena, que es absorber el incremento en la contribución obligatoria de los trabajadores, de modo que estos últimos tengan una mejor vejez, manifestó.
Destacó que la propuesta del organismo ha sido abrazada por Carlos Salazar, presidente del CCE, que se ha encargado de difundirla entre los empresarios, quienes le han dado el visto bueno, al igual que los sindicatos de trabajadores. Además, se espera que suceda lo mismo con el gobierno, pues el aumento a la aportación obligatoria estaría a cargo de los patrones y no de los empleados.
Con el esquema actual, dijo Sánchez Tello, los mexicanos recibirán una pensión de aproximadamente 30 por ciento de su último sueldo, mientras que con el incremento a 15 por ciento de la aportación obligatoria será hasta de 70 por ciento. Lo anterior significa que un trabajador que gana 10 mil pesos mensuales recibirá una pensión de 3 mil pesos, pero con las adecuaciones se elevará a 7 mil.
En tanto, añadió, el punto de bajar las semanas de cotización de mil 250 a 650 para tener derecho a una pensión ayudará a que más personas tengan acceso. “Debido a la alta informalidad, es difícil que alguien cotice 24 años en la formalidad. Con el esquema actual sólo 24 por ciento de aforados obtendrán una pensión, pero con el cambio, mínimo, serán 40 por ciento”.
Para Gustavo Leal, experto de la Universidad Autónoma Metropolitana en temas de seguridad social, es de celebrar la propuesta del CCE; sin embargo, es insuficiente para solucionar el desafío de las pensiones que enfrenta México, ya que al sistema le urge una modernización total, la cual debe salir del Poder Ejecutivo. Si sólo se queda en aumentar la contribución y bajar las semanas, se estaría pateando el bote hacia adelante.
El especialista apoyó la propuesta de elevar la aportación obligatoria; sin embargo, puso énfasis en que esos recursos adicionales que estarían inyectando los patrones deben ser acumulados en un nuevo fondo, administrado por algún ente alterno para obtener mejores resultados, dado que juntarlo con el que tienen las Afore serían sólo ponerle dinero nuevo al viejo.