Nueva York.- El rendimiento de los bonos estadounidenses operaba en máximos de cinco años el jueves, antes de que el Tesoro subaste una cantidad récord de notas a 30 años, su última venta de una emisión por 112.000 millones de dólares esta semana.
El Tesoro venderá 26.000 millones de dólares en bonos, por encima de los 22.000 millones de dólares de su última refinanciación trimestral en mayo.
“Todos los ojos están puestos en la subasta a 30 años. Si va bien, como la de 10 años de ayer, podría allanarse el camino para que las tasas bajen de nuevo”, dijo Gennadiy Goldberg, estratega de tipos de interés de TD Securities en Nueva York.
El Tesoro vivió una sólida demanda para su subasta récord de 38.000 millones de dólares en papeles a 10 años el miércoles y de 48.000 millones de dólares a tres años el martes. Ambas emisiones se liquidaron en precio antes de las subastas, lo que las hizo más atractivas.
Las autoridades aumentaron el tamaño de sus subastas a lo largo de la curva y dijeron que planean seguir pasando una parte cada vez mayor de su financiación a deuda a más largo plazo en los próximos trimestres para financiar las medidas para aliviar el impacto de la epidemia de coronavirus.
El retorno de los bonos a 30 años US10YT=RR mejoraba un punto básico, a 1,375%, distanciándose del 1,165% de una semana atrás, que fue su mínimo desde el 24 de abril.
El rendimiento de los papeles referenciales a 10 años US10YT=RR subía al 0,695%, tocando un pico de cinco semanas. El pasado jueves operó al 0,504%, su cota más reducida desde el 9 de marzo.
Analistas indicaron que los bonos siguen siendo atractivos porque pagan rendimientos más altos que la deuda comparable en el extranjero, mientras la preocupación por la renovada debilidad económica por el coronavirus mantiene una fuerte demanda por un activo de refugio como la deuda.