Londres.- Los precios del crudo caían este viernes, alejándose más de los máximos de 11 meses tocados la semana pasada y lastrados por preocupaciones de que las nuevas restricciones por la pandemia en China frenen la demanda de combustible en el mayor importador mundial de petróleo.
A las 10:37 GMT, los futuros del referencial internacional Brent perdían 1.11 dólares, o un 1.98%, a 54.99 dólares el barril, mientras que los del West Texas Intermediate (WTI) en Estados Unidos cedían 1.14 dólares, o un 2.15%, a 51.99 dólares el barril.
«La mayor fuente de preocupación para el complejo energético ahora mismo es el aumento de casos de coronavirus en China», dijo Stephen Brennock, de la correduría PVM. «Esto reducirá el panorama de consumo a corto plazo en el epicentro mundial para el crecimiento de la demanda petrolera mundial».
La recuperación de la demanda de combustibles en China apuntaló las ganancias del mercado a fines del año pasado, mientras Estados Unidos y Europa quedaban rezagados, pero esa fuente de apoyo se está desvaneciendo ante la imposición de nuevas restricciones por una nueva ola de casos de Covid-19.
El centro comercial de Shanghái reportó el jueves sus primeros casos de transmisión local en dos meses y Pekín está instando a la gente a no viajar durante la inminente festividad del Año Nuevo Lunar, cuando decenas de millones de trabajadores urbanos suelen trasladarse a sus pueblos natales.
El mercado está a la espera de los datos oficiales de inventarios petroleros de la Administración de Información de Energía de Estados Unidos, que se conocerán el viernes. Cifras de la industria mostraron el miércoles un inesperado aumento de 2.6 millones de barriles en las existencias, por encima de expectativas de analistas de un descenso de 1.2 millones de barriles.
“La demanda petrolera mundial podría declinar de forma marginal en el primer trimestre de 2021, ya que muchas regiones, incluidos muchos países europeos, han reintroducido restricciones a la movilidad», dijeron analistas de Fitch Ratings en una nota.
«Puede que los efectos positivos de los programas de vacunación sobre la recuperación de la demanda petrolera no sean visibles durante varios meses, hasta que sea inoculada una masa crítica de población», agregaron.