Escocia ve un resurgimiento en los ánimos independentistas tras Brexit

El primer ministro británico, Boris Johnson, había asegurado previamente que no aprobaría un segundo referéndum

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Londres.- El líder del Partido Conservador Escocés acusó a la primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, de anteponer «su partido a la pandemia» y dijo que sus planes de celebrar una segunda votación sobre la independencia son imprudentes.

Sturgeon sostuvo este mes que esperaba que un buen resultado de su Partido Nacional Escocés (SNP) en las elecciones de mayo le diera un mandato con el que poder celebrar un segundo referéndum sobre la independencia.

El primer ministro británico, Boris Johnson, había asegurado previamente que no aprobaría un segundo referéndum.

En cualquier caso, todavía no está claro si se celebrarán las elecciones de mayo. Escocia, como el resto del Reino Unido, lucha por controlar la propagación del Covid-19.

«Estamos viviendo bajo un confinamiento nacional y en medio de una pandemia mundial… Todos los políticos deben unirse y centrarse en el interés nacional en un momento de crisis», dijo el líder de los conservadores escoceses, Douglas Ross.

«Este plan es imprudente e irresponsable. Ha antepuesto su partido a la pandemia, y se ha arriesgado a dañar la confianza en el Gobierno cuando más se necesita», dijo, añadiendo que habría un «renovado impulso para frenarles en seco».

El SNP, por su parte, aseguró que se «opondrá enérgicamente» a cualquier desafío legal del Gobierno británico.

Escocia votó a favor de permanecer en el Reino Unido en 2014, pero los sondeos de opinión sugieren que muchos ciudadanos están ahora a favor de la independencia. Algunos consideran que el Gobierno británico sacó a Escocia de la Unión Europea en contra de su voluntad.

A diferencia de Inglaterra y Gales, la mayoría de los votantes de Escocia apoyaron la permanencia en la UE durante el referéndum del Brexit de 2016.

Los conservadores de Johnson, al igual que el principal partido de la oposición, los laboristas, tienen una dura tarea para recuperar a los votantes en Escocia. En una visita a Escocia la semana pasada, el primer ministro dijo a los nacionalistas que dejaran de hablar «sin parar» de un nuevo referéndum de independencia.