París.- Ya son varios países los que comenzaron desde el jueves a suspender de forma temporal y preventiva la aplicación de la vacuna contra el coronavirus de AstraZeneca, una decisión que surgió luego que Dinamarca, Islandia y Noruega reportaran casos de coágulos sanguíneos asociados presentemente tras la aplicación de la dosis desarrollada conjuntamente con la Universidad de Oxford.
Aunque aún falta una resolución de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés), es principalmente en ese continente donde se concentra la mayoría de las suspensiones.
Fue el presidente de Francia, Emmanuel Macron, quien comunició que el país que lidera suspende temporalmente el uso del fármaco de AstraZeneca, a la espera de recibir la opinión de EMA.
«La suspendemos hasta mañana por la tarde», dijo en una rueda conjunta con el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, con quien mantiene en la ciudad francesa de Montauban la XXVI cumbre bilateral entre ambos países.
Macron aclaró que la decisión fue por precaución y siguiendo la recomendación del ministro francés de Sanidad, Olivier Véran, en coordinación con las autoridades sanitarias de ese país. «Esperamos poder retomarla rápido, si la opinión de la EMA lo permite», añadió el jefe de Estado francés.
La Agencia Italiana de Medicamentos (AIFA) fue quien comunicó la decisión como precaución ante el fármaco de la empresa con sede en Cambridge, Reino Unido, tras los recientes casos de trombosis en Europa.
Esta decisión le sigue a la medida aplicada por ese mismo país que decidió la semana pasada suspender la aplicación de dosis que estaban dentro de un lote, esto tras la muerte de un militar y un policía en Sicilia (sur), que la Justicia italiana está investigando.
El Ministerio de Sanidad de la Federación de Alemania informó este lunes la suspensión «con carácter preventivo» por las dosis de AstraZeneca y la Universidad de Oxford, aunque no es la primera medida limitante contra esta vacuna.
Previamente, el país ya había decidido aplicar la dosis de AstraZeneca solamente para personas que fluctúan entre 18 y 64 años, al considerar que no se habían realizado pruebas suficientes con personas mayores.
Pero esa restricción fue eliminada para acelerar el proceso de vacunación.
