Tiempos de debate y reflexión económicos para México
Mario Sandoval Chávez
En nuestro país se resuelven temas relevantes en las cámaras, ya sea la Reforma Fiscal o la Energética, han sido diversos los posicionamientos, los que están a favor y de quien están en contra, voces de expertos en la materia y de personajes que no aportan al debate con elementos de valor, más que nada politizados y que no dan más argumento que su apasionamiento político.
En ocasiones el ciudadano de a pie, es un observador pasivo del debate, piensa que son otros los que dominan los temas y que por lo tanto tiene poco que aportar al tema a excepción de mostrar simpatía o antipatía con relación a aquella persona, grupos o afinidad política con la que mejor se identifica. Sin embargo eso le resta valorar el contenido de los cambios clave y los efectos que tendrán para la mayoría.
La Reforma Fiscal, destaca por la incorporación del Régimen Simplificado de Confianza, lo cual sin generar la incorporación de nuevos impuestos, si genera una ampliación relevante a la base de contribuyentes, que hasta ahora no aportaban de manera justa con relación a los contribuyentes activos. Sera enfocado a simplificar el cumplimiento de pago de impuestos.
Con ello personas físicas y micros y pequeñas empresas, tendrán facilidades administrativas y tasas de ISR de entre el 1% y 2.5%. La apuesta es la ampliación de la base tributaria y la expectativa de SHCP es incrementar la base en un 30% a efecto de que la recaudación que es de niveles del 15% del PIB, llegue a niveles del 20% y así de manera progresiva se ubique en niveles del 30% del PIB.
En términos de contribuyentes esto pretende incorporar a 10 millones de contribuyentes, que hoy no lo hacen y que afecta las finanzas públicas, así mismo pretenden generar presión sobre los contribuyentes evasores de gran tamaño y que han hecho toda una estrategia para evadir o eludir el pago de impuestos, por lo que el efecto de esta Reforma, tiene efectos directos a toda la sociedad y sus expectativas.
Ahora bien todos exigimos mejor calidad de educación, servicios de salud, infraestructura, seguridad pública y justicia. Del total del PIB se destinan el 4% a Educación, el 6% a Salud, 2% a infraestructura y el 1% a Seguridad Pública y Justicia. Lo cual es menos de la mitad de los que los países desarrollados invierten en esos sectores y que son el reflejo de desequilibrio y desigualdades regional.
Ahora bien esos indicadores de inversión con relación a países como Brasil o Chile que tiene niveles de recaudación superior al 30% de su PIB, nos refleja que el tema de esta Reforma Fiscal es necesaria y urgente, para poder garantizar crecimiento sostenido en el PIB en los próximos años, en especial con la integración al TMEC y a las necesidades de certidumbre que demanda la inversión privada.
Eso es lo bueno y lo malo es la impunidad en la que diferentes personajes del sector público y privado, han aprovechado la defraudación histórica, que desde luego buscaran evitar a toda costa pagar lo que deben y evadir responsabilidades, por ello en el Poder judicial y la FGR tienen entre sus pendientes los procedimientos de los asuntos de alto impacto que no han sido resueltos y fomentan la impunidad.
La recaudación es importante y si bien al ciudadano de a pie, no se le explica con claridad que el 50% del PIB de México se destina a pagar servicio de deuda contratado en los últimos 30 años, es decir se recauda poco y lo que recaudamos es para pagar la deuda que Gobiernos anteriores resolvieron como fue el caso de FOBAPROA o bien de rescates Carreteros, Gobiernos Estatales dispendiosos, etc.
La lealtad y apoyo en gobiernos anteriores, se ha pagado con generosidad en rescates a entidades emproblemadas presupuestalmente, o como el caso FOBAPROA que terminaría de pagarse después del año 2080, es decir la deuda se reestructura a plazos muy largos (décadas) que pagamos todos con nuestros impuestos y además serán cubiertas por las siguientes 4 generaciones de mexicanos.
La deuda es buena si se genera de manera productiva en infraestructura, desarrollo tecnológico e investigación, pero si es para reestructurar rescates y fallas de planeación o malos manejos de los recursos públicos, se vuelve un factor en contra, así que aunado a una baja recaudación, nos genera bajos crecimiento año con año, pue son están dadas las condiciones para estimular la inversión.
La administración actual impulsa la cuarta trasformación, puede ser bien intencionada, pero está nadando con tiburones, y muchas veces el enemigo está adentro, pues no van a perder sus cuotas de poder y los privilegios que han obtenido con el tiempo. La victoria generó alianzas y posturas de apoyo. Sin embargo hay temas en donde resultados esperados aun están por verse y ser evaluados.
Ahora ya está en debate diario el tema de la Reforma Eléctrica, con posturas de todo tipo y que para no caer en óbice de repeticiones innecesarias, señalaría que lo importante es que los verdaderos expertos de las empresas involucradas y del sector publico debatan en foro abierto en las cámaras, que se analice el tema del porteo transporte eléctrico, la subcontratación y las tarifas justas que todos esperan.
A pesar de todas las barbaridades y excesos cometidos en diversas administraciones, los recursos naturales y en materia de energía siguen siendo relevantes, ya sea la energía eléctrica hidráulica, solar, eólica, nuclear, ciclo combinado, el litio, todas las tiene México, pocos países pueden tener ese potencial y les corresponde a todos los mexicanos, no a una minoría que solo ve por sus intereses y no el de la mayoría.
Será un Reforma de fondo con temas a debate como la concentración y autorregulación que plantea la iniciativa, es buena su solidez, pero no caer en lo que sucedió en Pemex y la propia CFE en el pasado, generando además un sindicalismo protegido y consentido presupuestalmente, no tanto para los verdaderos trabajadores, sino para las cúpulas sindicales, que han limitado una mayor eficiencia y productividad.
Ambas Reformas (Fiscal y Energética) serán importantes para todos los mexicanos, serán un factor para la inversión, no hay duda que el cierre de este año será superior al 6% del PIB, pero el reto será mantener el 4% del PIB por año en los siguientes tres ejercicios como mínimo, la inflación si bien alta, se ajustará en el corto plazo y el tipo de cambio seguirá estable en niveles promedio de 20 pesos.
La recaudación y su direccionamiento productivo son elementos para garantizar un estímulo al sector productivo, hoy el apoyo financiero a MIPYMES no es superior al 1.5% del PIB de todo el sector financiero público y privado. Pese a que genera el 55% del PIB nacional y el 75% del empleo formal. Ese déficit entre lo que se recibe financiamiento y lo que se genera explica la falla de crecimiento económico.
El Sector Financiero Publico entre autoridades como CNBV, CONDUSEF, Banca de Desarrollo, tiene una enorme deuda con el país. En estos 3 años de gestión, ha sido uno de los sectores de este gobierno que menor avance reporta, por el contrario un retroceso como lo explican los resultados de la banca de desarrollo a septiembre 2021 que reporta un decrecimiento del 13% anual con cifras de CNBV.
Se quiere genera mayor recaudación, para estimular la creación de empleos formales, dinamizar las regiones y sus economías locales. No se piden subsidios o rescates a MIPYMES sino apoyos y condiciones competitivas. Las Reformas deben asociar un compromiso con ello, pasar del discurso plano a los hechos. Quedan 3 años a este gobierno y sus metas están asociadas a crecimiento económico prometido serán el factor clave para el 2024.
CEO FISAN SOFOM ENR
Banquero a nivel Directivo con más de 30 años de experiencia de negocios.
Ex Presidente Nacional AMFE
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