Ciudad de México.- La Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada (AMESP), el organismo más representativo y grande de este sector, seguirá siendo el principal impulsor de la regularización y profesionalización de todas las empresas de seguridad privada que existen en México, aseguró su presidente, capitán Salvador López Contreras.
Al encabezar reuniones de trabajo, por separado, con la Cámara Nacional de Fabricantes de Envases Metálicos (Canafem) y la Confederación Nacional de Distribuidores de Acero A.C. (Conadiac), que representa, la primera, al 90 por ciento de los productores de envases y tapas metálicas del país y, la segunda, a los principales distribuidores, trasformadores y Centros de Servicio de Acero de México, mencionó que la profesionalización de sus trabajadores es la columna vertebral de todos sus objetivos y estrategias desde la conformación de esta Asociación, hace casi 10 años.
Actualmente la AMESP, dijo, integra a las 163 empresas más grandes, sólidas e importantes que operan actualmente en el país. Tiene presencia en todo el territorio nacional y matrices en 22 estados de la República como: Aguascalientes, Baja California, Chiapas, Chihuahua, Ciudad de México, Coahuila, Colima, Durango, Estado de México, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Nuevo León, Puebla, Querétaro, Quintana Roo, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Veracruz y Yucatán.
Recordó que, desde su creación, el 25 de junio de 2012, la AMESP ha sido el principal impulsor de la regularización de las empresas que integran el sector de la seguridad privada a través de la creación de una ley nacional en la materia y de una Cámara Nacional de Empresas de Seguridad Privada que organice al sector, ponga alto a la ilegalidad y cuente con una representación formal ante el gobierno.
Salvador López Contreras manifestó que hoy es innegable el desarrollo y crecimiento del sector de la seguridad privada en México, ya que participa con el 2 por ciento del producto interno bruto (PIB) y cuenta con más del 18 por ciento del total de trabajadores en el país con aproximadamente 180 mil.
Puso de relieve que, a partir del 2022, el 70 por ciento de las empresas realizarán más inversiones en tecnología, y estas incluirán temas de seguridad, para lo cual la AMESP y sus afiliados están preparados.
Por su parte, la directora ejecutiva de la AMESP, Verónica Torres Landa, hizo la presentación del panorama de la seguridad en México y la importancia de la seguridad privada como colaboradora de la Seguridad Pública para prevenir el delito y la inseguridad.
Destacó también el por qué las empresas de seguridad privada deben pertenecer a una asociación democrática como la AMESP. “Para contar con un aval moral y se solidifique el tema de la seguridad, así como evitar a las empresas “patito” que pululan por toda la República, hagan un mercado desleal y, sobre todo, provoquen gran daño, porque no tienen personal capacitado, no brindan los servicios por los cuales fueron contratados y luego generan muchos dolores de cabeza”.
El presidente de la AMESP insistió ante los integrantes ambas organizaciones empresariales, que presiden Isaías Zapata Moran y Roberto Gutiérrez, respectivamente, que la Seguridad Privada es en México un sector de gran relevancia, que trabaja en todas las industrias y todos los niveles. “Se podría decir que la mayoría de las personas, sobre todo en las zonas urbanas del país, cuentan o han utilizado los servicios de nuestras empresas”, precisó el capitán Salvador López Contreras.
En sendas reuniones, tituladas “Desafíos de la Seguridad en México y la seguridad privada coadyuvante”, convocadas por el presidente de la Comisión de Relaciones Institucionales y Enlace Gubernamental, Luis Barrañón Castillo, participaron integrantes de sus mesas directivas y afiliados, quienes se mostraron interesados de la forma como pueden colaborar para mejorar la seguridad de sus empresas.
Mención especial hicieron los integrantes de la Confederación Nacional de Distribuidores de Acero A.C. (Conadiac), la cual agrupa a 141 empresas afiliadas, con mil 535 empleados capacitados y surten de este importante producto a centros comerciales, tiendas de productos de materiales para la construcción y ferreterías.
Tienen una producción de 18.4 millones de toneladas anuales, con lo cual ocupa el lugar 15 en el mundo y 2º en América Latina. Sin embargo, en México el consumo anual es de 27.1 millones lo que hace necesario una importación de 13.7 millones en toneladas en promedio.
Dado su gran demanda y el alto precio de los productos de acero y sus derivados, la producción, almacenamiento, distribución y consumo registra actualmente un alto índice de robos y saqueos, del 42 por ciento. Es por ello que requiere de la participación de la seguridad privada, para prevenir estos delitos y el diseño de estrategias de seguridad.
Por ello QUE la AMESP, mostró su mejor disposición para colaborar con ambas organizaciones y prevenir y combatir la inseguridad que padecen.
