Ciudad de México.- Este domingo se discute en la Cámara de Diputados el proyecto de dictamen sobre la reforma eléctrica enviada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, en una sesión que se prevé será maratónica.
El Pleno tenía previsto discutir el dictamen el pasado martes 12 de abril, pero Morena y sus aliados (PT y PVEM) hicieron valer su mayoría para posponer la discusión hasta este domingo.
Poco a poco los diputados fueron llegando al recinto de San Lázaro para iniciar la sesión que se piensa terminará hasta este lunes.
La sesión inició poco antes de las 11 de la mañana. Antes de iniciar la lectura del orden del día se dio un minuto de aplausos en honor a la reconocida activista mexicana por los derechos humanos Rosario Ibarra, quien falleció el sábado a los 95 años en la ciudad de Monterrey, Nuevo León.
El presidente Andrés Manuel López Obrador promociona la propuesta como vital para sus planes de transformar al país, a pesar de las críticas de empresas y gobiernos de importantes socios comerciales como Estados Unidos, quien ha cuestionado duramente la iniciativa.
Una alianza de fuerzas políticas de oposición también descartó apoyar los cambios a la ley, lo que significa que es probable que el partido de López Obrador y sus aliados no alcancen la mayoría de dos tercios requerida para su aprobación en la cámara baja.
Pero el Presidente, que busca aprovechar su reciente victoria en un inédito referendo revocatorio que él mismo promovió, prometió seguir impulsando la legislación y ha calificado a aquellos que se contraponen como «traidores a la patria».
López Obrador argumenta que las administraciones anteriores manipularon el sector eléctrico a favor de intereses privados y asegura que la reforma mejorará la independencia de la industria del capital extranjero.
La propuesta busca colocar a la estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE) como eje rector del mercado y establece que estará encargada de generar al menos un 54% de la energía eléctrica del país.
Además, cancela los permisos de generación previamente otorgados, así como los contratos de compraventa de electricidad con el sector privado, y garantiza el dominio de la nación sobre las reservas de litio, un mineral estratégico del que México tendría grandes reservas.
A principios de abril, los planes del mandatario recibieron un espaldarazo de la corte suprema que avaló puntos clave de una reforma a la Ley de la Industria Eléctrica que favorece el papel de la CFE.
Si los cambios propuestos a la carta magna no son aprobados por los diputados, López Obrador dijo que enviará al Congreso una iniciativa de reforma a la Ley Minera para proteger el litio y garantizar que al menos una parte del proyecto tenga éxito.