Nueva York.- Tesla Inc superó las estimaciones de ingresos y beneficios trimestrales de Wall Street, en momentos en que el fabricante de coches eléctricos sube sus precios en respuesta a la inflación, compensando además el impacto del confinamiento de una fábrica en Shanghái.
Tesla ha sido una empresa atípica desde el estallido de la pandemia, registrando un récord de entregas y beneficios durante varios trimestres mientras que sus competidoras, que enfrentan problemas en la cadena de suministro mundial, han paralizado su producción.
«Nuestras propias fábricas han estado funcionando por debajo de su capacidad durante varios trimestres, mientras la cadena de suministro se convirtió en el principal factor limitante, lo que es probable que continúe durante el resto de 2022», dijo en un comunicado Tesla, cuyas acciones subían un 4% en las operaciones posteriores al cierre del mercado.
Tesla dijo que la escasez de chips y los recientes brotes de Covid-19 han estado pesando en su cadena de suministro y en las operaciones de la fábrica, mientras los precios de algunas materias primas se han multiplicado en los últimos meses.
La empresa subió sus precios en China, Estados Unidos y otros países después de que su presidente ejecutivo, Elon Musk, dijera en marzo que la empresa enfrentaba una importante presión inflacionaria en las materias primas y la logística en el contexto de la guerra en Ucrania.
El fabricante de automóviles más valioso del mundo dijo que sus ingresos fueron de 18,800 millones de dólares en el primer trimestre terminado el 31 de marzo, frente a las estimaciones de 17,800 millones de dólares, según los datos de IBES de Refinitiv. Esto supone un aumento del 81% respecto al año anterior.
Musk se ofreció a comprar Twitter la semana pasada, lo que provocó la preocupación de que se distrajera de las operaciones de Tesla en momentos en que la empresa está aumentando la producción en las nuevas fábricas de Berlín y Texas.
Las nuevas fábricas serán clave para satisfacer la demanda y reducir la dependencia de su planta de China, la más grande, que se está recuperando lentamente de medidas de confinamiento.
Existe la preocupación de que Musk pueda vender acciones de Tesla o pedir préstamos contra una emisión de papeles de la compañía para financiar su oferta de 43,000 millones de dólares para comprar Twitter.
