Fráncfort.- El Banco Central Europeo (BCE) podría empezar a subir las tasas de interés en julio, advirtió el miércoles su presidenta, Christine Lagarde, en un momento en que la zona euro se enfrenta a un repunte de la inflación.
El BCE «terminará» sus compras netas de activos «a principios del tercer trimestre», o sea en julio, y entonces «algún tiempo después» se producirá una primera subida de tasas», dijo Lagarde, añadiendo que «esto podría significar un periodo de solo unas semanas».
El BCE tiene prevista su próxima reunión de política monetaria el 9 de junio en Ámsterdam, seguida de otra el 21 de julio en Fráncfort, antes de las vacaciones de verano.
«Después de la primera subida de tasas, el proceso de normalización será gradual», añadió Lagarde, sugiriendo que habrá más subidas tras el verano.
Dentro del BCE, el clan de los «halcones», que aboga por una política monetaria más estricta ante la elevada inflación, quiere iniciar de inmediato el ciclo de subidas de tasas.
«Como la inflación en la eurozona sigue siendo alta, tenemos que actuar», dijo el martes el presidente del Bundesbank alemán.
La inflación en la zona del euro alcanzó un récord del 7.5% interanual en abril, según Eurostat, muy por encima del objetivo a medio plazo del BCE del 2.0 por ciento.
«Lo que comenzó como un impacto único ahora se ha convertido en un fenómeno de base más amplia», dijo el responsable de políticas del BCE, Bostjan Vasle, en el mismo evento. «Cuando las circunstancias cambian, debe seguir la respuesta de política monetaria», agregó el gobernador esloveno.
Isabel Schnabel, miembro de la junta del BCE, dijo que el BCE necesitaba actuar ahora para proteger su credibilidad y evitar que las expectativas de inflación, que han subido al 2% o un poco más, se salgan de control.
