Londres.- El Reino Unido he empezado a sentir el impacto de la inflación después de que su producto interior bruto (PIB) sufriese una contracción del 0,1 % entre abril y junio, frente al crecimiento del 0,8 % en el primer trimestre, según datos divulgados este viernes por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS).
En el segundo trimestre, el sector servicios -considerado el pulmón económico del Reino Unido- descendió el 0,4 %, el industrial no registró variación, mientras que la construcción subió el 2,3 %, de acuerdo con el primer cálculo del PIB para ese periodo.
La caída en el segundo trimestre respondió sobre todo a los descensos registrados en el mes de junio en los principales sectores de la economía -servicios, industria y construcción-.
No obstante, la contracción no ha sido tan pronunciada como la anticipada por algunos expertos, que esperaban una caída del 1,3 %.
En junio, el PIB bajó el 0,6 % después de que el área de servicios retrocediera el 0,5 %, el sector industrial bajara el 1,6 % y la construcción descendiera el 1,4 %.
Según precisó la ONS, la contracción respondió especialmente a la caída en el sector sanitario, al registrase un descenso en las actividades para combatir la covid-19, mientras que el consumo de los hogares cayó un 0,2 % en el segundo trimestre.
La ligera contracción económica entre abril y junio se conoció días después de que el Banco de Inglaterra advirtiera de que el Reino Unido puede entrar en recesión -dos trimestres consecutivos de contracción económica- a finales de año y podría durar durante 2023 antes de empezar a verse una recuperación.
La entidad inglesa subió recientemente del 1,25 % al 1,75 % los tipos de interés a fin de controlar la inflación interanual, que está en el 9,4 %, pero se espera que suba al 13 % a final del año.
El objetivo del banco central inglés es mantener la inflación en el 2 %.
Este incremento responde al alza de los precios de la energía por el impacto de la guerra en Ucrania así como por la recuperación de la economía global tras la pandemia de la covid-19.
El director de estadísticas de la ONS, Darren Morgan, dijo que la economía se contrajo levemente después de un crecimiento en mayo pero con una «caída notable» en junio.
Los minoristas afrontaron un segundo trimestre difícil, pero hubo un crecimiento en sectores como hoteles, bares, peluquerías y eventos al aire libre, en parte por la celebración del Jubileo de Platino -los 70 años del trono de la reina Isabel II) en junio, añadió.
Asimismo, el ministro de Economía, Nadhim Zahawi, dijo a los medios que la economía mostró fortaleza después de la pandemia y resaltó que el país podrá «superar nuevamente desafíos globales».
«Sé que los tiempos son difíciles y que la gente estará preocupada por el aumento de los precios y la desaceleración del crecimiento, y por eso estoy decidido a trabajar con el Banco de Inglaterra para controlar la inflación y hacer crecer la economía», subrayó.
Los expertos vislumbran un periodo económico difícil para los consumidores después de que la consultora Cornwall Insight avisara esta semana que las facturas de la energía pueden llegar a partir de enero a 4.266 libras (5.050 euros), que es el precio máximo anual que las empresas energéticas pueden cobrar a cada hogar.
En octubre de 2021, el límite del precio energético estaba en 1.400 libras (1.666 euros) anuales, pero el pasado abril subió a 1.971 libras (2.345), mientras que se espera que este octubre el precio trepe a 3.358 libras (3.996 euros). El precio correspondiente a octubre será anunciado a finales de este mes de agosto.