- Alejandro Moreno cambia coalición opositora por la 4-T
- Alianza “Va por México” suspendida y muy fracturada
- “Alito” se acoge a la frase amlista “amor con amor se paga”
Juan Barrera Barrera
Sn duda la figura política del momento es el dirigente del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas por el ¿repentino? cambio de opinión en torno a la “militarización” de la Guardia Nacional que promueve el gobierno de la Cuarta Transformación, aunque con que ello lleve a traicionar a sus socios políticos de la oposición PAN-PRD.
Un sector del PRI encabezado por “Alito” y Rubén oreira decide apoyar la iniciativa del presidente de la República Andrés Manuel López Obrador en su intención de reformar la Constitución para que la Guardia Nacional pase a depender de las Fuerzas Armadas extender el periodo para que el ejército pueda patrullar las calles y de paso rompe la alianza opositora “Va por México”.
El dirigente de ese partido, quien se había crecido al castigo y radicalizado contra el gobierno morenista por la campaña negra, según él, que AMLO le ha orquestado a través de la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, quien lleva varias semanas filtrando audios escandalosos que comprometen al líder del partido tricolor.
PRI da giro y apoya a AMLO sobre Guardia Nacional
El cambio diametral de opinión del dirigente nacional del PRI desconcertó a sus aliados políticos del PAN y PRD que reaccionaron de bote pronto y determinaron tomar una decisión. Tanto Marko Cortés como Jesús Zambrano acordaron suspender la alianza electoral y parlamentaria hasta que el PRI defina su postura de si va o no a prorrogar la participación de los militares en las calles hasta el 2028.
“La suspensión temporal de nuestra coalición legislativa y electoral, hasta en tanto el PRI no defina con claridad si habrá de honrar nuestra plataforma electoral común de la coalición Va por México que firmamos en el 2021 y la moratoria constitucional que firmamos en junio del presente año», indicaron en un comunicado las dirigencias del PAN y PRD.
Los dirigentes de esos partidos, Marko Cortés y Jesús Zambrano, respectivamente piden que el PRI retire la propuesta de la diputada Yolanda de la Torre para duplicar el tiempo para que el ejército mexicano mantenga tareas de seguridad nacional, que al mismo tiempo ha dividido al partido tricolor, ya que otro sector encabezado por el senador Miguel Ángel Osorio Chong, rechazan el cambio de posición de su dirigente.
La pregunta que muchos se hacen es por qué “Alito” decidió dar un golpe de timón y aliarse con López Obrador y asestar un fuerte golpe a la coalición opositora “Va por México” que la deja casi muerta políticamente ante el umbral de los estratégicos comicios en el estado de México de 2023.
“Alito” Moreno está dispuesto a apostar todo lo que tiene. Rechazó el ultimátum de sus aliados Cortés y Zambrano y en conferencia de prensa respondió: “Tenemos un proyecto conjunto, pero eso no quiere decir que coincidamos en todo”. Y agregó “Esto es por México, por la gente”, y preguntó a sus pares ¿Con quién están?, ¿con los intereses de partido o con el interés supremo del pueblo de México?
Moreno Cárdenas fractura a la alianza opositora
Moreno Cárdenas tenía un as bajo la manga y mostró astucia que rebasó por la izquierda el discurso de López Obrador con esas interrogantes y diagnóstico. “La estrategia de seguridad falló y es un fracaso, pero la Guardia Nacional no está lista aún para garantizar la seguridad en las calles, ni podían desamparar a las familias mexicanas”.
Si López Obrador cambió de opinión con relación al polémico tema cuando era opositor y ahora reconoce que es necesaria la presencia militar para la pacificación y explicó el porqué. Dijo que había encontrado un cuerpo de seguridad de 140 mil elementos, el 50 por ciento de los cuales eran administrativos y el resto operativos, amén de la corrupción en la corporación. Qué necesaria era una explicación, no discurso.
El diputado Moreno Cárdenas también ha cambiado de opinión, el problema es que resulta poco creíble que le preocupe el interés supremo del pueblo ante los ojos de quienes lo conocen de cerca y de lejos, ya que se ha ganado el repudio del público por el contenido escandaloso de audios difundidos por Layda Sansores, que por cierto anunció que ya no hablará más de Moreno en su programa Martes del Jaguar.
El dirigente priísta asegura que la coalición no está en riesgo, es un muro de contención, por lo que romperla solamente por la posición del PRI respecto a la Guardia Nacional es minimizar su función, sostuvo. Sin embargo, la realidad es todo lo contrario. La coalición está fracturada. Era una alianza muy endeble y se rompió por lo más débil o será que el Jaguar logró asustarlo.
Qué tan gordo será el expediente judicial de “Alito”
La pregunta obligada es de qué tamaño será el expediente judicial no solamente de Alejandro Moreno, sino también de su mano derecha en la Cámara de Diputados, Rubén Moreira, quien ha defendido con ahínco la propuesta de extender constitucionalmente la presencia militar en tareas policiacas.
Con su apoyo en votos a la propuesta oficial sobre la Guardia Nacional ¿compró “Alito” su salvoconducto para que ya no lo investiguen?, porque el viraje radical de Moreno Cárdenas no se entiende sin sopesar su situación personal. Moreno Cárdenas se sentía víctima y perseguido político, a tal grado que ya se le vía con un pie en la cárcel. El ex gobernador de Campeche acaso se acogió a la frase lopezobradorista de “amor con amor se paga”.
Alejandro Cárdenas no solo no fractura la alianza “Va por México”, sino que arrastra a su partido a una crisis interna de la cual ya no se podrá recuperar si es que albergaban alguna esperanza en los comicios del 2023 y 2024.
La coalición opositora pierde al PRI, AMLO ¿gana con “Alito”?