Nueva York.- Los precios del petróleo subieron ligeramente el viernes como consecuencia de un vertido en el terminal iraquí de Basora, pero cerraron la semana con un descenso por el temor a que las fuertes alzas de las tasas de interés frenen el crecimiento económico mundial y la demanda de combustible.
Las exportaciones de petróleo desde el puerto de Basora se interrumpieron en la noche de jueves debido a un vertido, informaron fuentes del sector, que añadieron que los esfuerzos para contener el problema podrían durar más de una semana.
Los futuros del crudo Brent subieron 51 centavos, o un 0,56%, a 91,35 dólares el barril. Los futuros del crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) ganaban 1 centavo, o un 0,01%, a 85,11 dólares. Ambos contratos acumularon un descenso de alrededor del 1% en la semana.
Ambos referenciales sumaron su tercera pérdida semanal consecutiva, perjudicados en parte por la fortaleza del dólar, que encarece el petróleo para los compradores que utilizan otras divisas. El índice dólar se mantenía cerca de su máximo de la semana pasada, alrededor de las 110 unidades.
En lo que va del tercer trimestre, tanto el Brent como el WTI han bajado un 20%, lo que supone los peores descensos porcentuales trimestrales desde el inicio de la pandemia de coronavirus en los tres primeros meses de 2020.
Los inversores se preparan para un aumento de las tasas de interés en Estados Unidos, y el mercado también se ve sacudido por las perspectivas de la Agencia Internacional de la Energía de un crecimiento casi nulo de la demanda de petróleo en el cuarto trimestre, debido a unas perspectivas de demanda más débiles en China.
«Tanto el FMI como el Banco Mundial han advertido que la economía mundial podría entrar en recesión el próximo año. Esto supone una mala noticia para el lado de la demanda del petróleo y llega un día después de la previsión de la AIE (sobre) la demanda de petróleo», dijo el analista de PVM Stephen Brennock.
«Los temores a una recesión, junto con las expectativas de aumento de las tasas de interés en Estados Unidos, conforman un potente cóctel bajista».
Otros analistas dijeron que la confianza se resintió por los comentarios del Departamento de Energía de Estados Unidos sobre que es poco probable que intente rellenar la Reserva Estratégica de Petróleo hasta después del ejercicio 2023.
Por el lado de la oferta, el mercado ha encontrado cierto apoyo en la disminución de las expectativas de un retorno del crudo iraní, ya que los funcionarios occidentales restan importancia a las perspectivas de reactivar un acuerdo nuclear con Teherán.
Los precios del petróleo también podrían verse respaldados en el cuarto trimestre por los posibles recortes de producción de la OPEP+, que se debatirán en la reunión del grupo de octubre, mientras que Europa se enfrenta a una crisis energética motivada por la incertidumbre sobre el suministro de petróleo y gas de Rusia.