Política Global

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  • Los jueces de EU defienden leyes pro-armeros
  • México pierde primera demanda, va a Corte de Apelaciones

Juan Barrera Barrera

El 30 del mes pasado el juez Dennis Saylor, desechó la demanda civil que el gobierno mexicano interpuso en agosto del 2021 contra 11 principales fabricantes de armas estadounidenses, porque las empresas demandadas son conscientes de que sus productos son traficados y utilizados en actividades ilícitas contra la población civil y las autoridades.

El juez de Massachusetts confirmó el poderío tradicional, legal y económico, del que gozan los fabricantes de armas, organizados en la centenaria Asociación Nacional del Rifle. Después de más de un año de la demanda del gobierno de México, a través de la secretaria de Relaciones Exteriores, el impartidor de justicia fue derrotado por una ley muy poderosa.

Las leyes blindan a los fabricantes de armas

Desde 2005 una ley nacional (ley de Protección del Comercio Legal de Armas) blinda a los fabricantes de armas ante juicios iniciados ante el mal uso, como los tiroteos masivos, suicidios y homicidios, lo que hace prácticamente intocables a estos poderosos empresarios, amparados igualmente en la Segunda Enmienda que otorga el derecho constitucional a los ciudadanos estadounidenses a poseer armas.

La polémica ley de Protección del Comercio Legal de Armas mató los argumentos de la parte mexicana, que sostuvo sobre la negligencia de empresas estadounidenses que fabrican, distribuyen y venden armas de fuego, que facilita su tráfico ilícito hacia México. Las armas matan razonamientos, parece decirlo y aceptarlo el juez Saylor en su sentencia. «Aunque el tribunal siente una gran simpatía por el pueblo de México, y ninguna por quienes trafican con armas para las organizaciones criminales mexicanas, tiene el deber de cumplir la ley».

Es una evidencia más de la fuerte presencia que tienen los armeros del país vecino en el Congreso de los Estados Unidos que no han querido o no han podido legislar en favor de las personas que han sido víctimas de la fabricación, distribución y comercialización de las armas, dentro y fuera del país vecino del norte. También en Estados Unidos se legisla para cubrir los intereses, a veces muy aviesos, de empresarios poderosos que pagan mucho dinero a sus lobistas para convencer a los congresistas para que no modifiquen esas leyes. Pero hay una novedad legal que México aprovechará.

Segunda demanda, a ver si hay jueces de Berlín en EU

En Estados Unidos hay una nueva legislación que acaba de entrar en vigor, que fue impulsada por la masacre en una escuela de la ciudad texana de Uvalde. Esa ley establece como delito federal el tráfico ilegal de armas y sanciona a prestanombres o a quienes compren armas que vayan a ser utilizadas por grupos criminales.

El miércoles durante su comparecencia en el Senado, el canciller Marcelo Ebrard, quien ha sido la cabeza de la inédita iniciativa mexicana para “evitar que armas de fuego, muchas de alto poder, causen violencia en nuestro país”, anuncio que se México apelará la decisión del juez federal y seguirá insistiendo en que el comercio de armas debe ser responsable, transparente y con rendición de cuentas, y que la forma negligente como se venden en los Estados Unidos facilita que los criminales accedan a ellas.

A través de esta segunda demanda el gobierno de México intentará aprovechar la nueva legislación bipartidista: “Vamos a demostrar que en muchos de estos puntos donde se venden estos productos están operando prestanombres y se tiene que empezar a fincar responsabilidades penales”, informó Ebrard Casaubon, quien asegura que las empresas saben van esas armas, pero aún está en estudio los delitos que van a reclamar y la estrategia que se va a seguir.

Un puno importante y novedoso es que en este segundo intento las acusaciones ya no se radicarán en Massachusetts, estado en donde muchas de las armerías demandadas tenían su sede y también por evitar otros circuitos judiciales con influencia republicana, Texas, por ejemplo.

Ahora, la parte demandante ha optado por Arizona. Muchos se preguntarán por qué en ese estado de acento muy conservador. Es que ahí se han detectado una gran cantidad de tiendas que venden armas sin revisión de antecedentes o incumplen otros requisitos de ley, lo que facilita el flujo de armas hacia grupos de criminales.
Marcelo Ebrard, fuerte precandidato a la presidencia de México, ejemplificó que de enero de 2020 a la fecha las autoridades mexicanas han asegurado 55 mil 996 armas y la inmensa mayoría en la frontera con Estados Unidos, de las cuales 21 mil 430 son armas largas de alto poder.

Afirmó que el tráfico de todas esas armas es superior al número y capacidad de fuego que todo lo que compramos en un año para nuestras Fuerzas Armadas o policías. Es imposible reducir la violencia con este número de armas largas que se están asegurando, producto del trabajo de nuestras instituciones mexicanas.

La segunda demanda la interpondrá México ante la Corte de Apelaciones, informó el jefe de la diplomacia mexicana, el lunes 10 de este mes. Ya veremos si hay jueces de Berlín en Estados Unidos o sí los fabricantes se siguen imponiendo… por sus pistolas.