Nueva York.- La Bolsa de Nueva York abrió en baja el viernes la última sesión de un muy mal año para las acciones, el peor desde 2008.
El índice Dow Jones perdió 0.57%, el tecnológico Nasdaq cayó 1.11% y el S&P 500, 0.78%, a los pocos minutos de la apertura.
El jueves los índices habían dado un rebote. En una jornada con poco volumen de operaciones, lo que amplifica las variaciones, el Dow Jones ganó 1.05% a 33,220.80 puntos, el Nasdaq 2.59% a 10,478.09 puntos y el S&P 500, 1.75%, a 3,849.28 puntos.
La mayoría de los valores tecnológicos y de crecimiento sensibles a las tasas, como Apple Inc, Amazon.com Inc, Alphabet Inc y Meta Platforms Inc caían entre un 1,5% y un 1.8% el viernes, mientras subían los rendimientos del Tesoro estadounidense.
Los descensos hicieron que los servicios de comunicación, la tecnología y el índice de minoristas fueran los que más bajaban del S&P 500, más de un 1.2% cada uno.
Los tres principales índices de Wall Street se encaminaban a su primera caída anual tras tres años consecutivos de ganancias, ya que el alza de los costos de endeudamiento para frenar la escalada de los precios marcó el fin de la era del dinero barato.
Los inversores evitaron las apuestas más arriesgadas y se refugiaron en activos más seguros, como el dólar, lo que hizo caer el índice de referencia S&P 500 un 20% y el tecnológico Nasdaq casi un 34% este año.
Ambos referentes iban camino de cerrar con sus mayores caídas anuales desde la crisis financiera de 2008.
El índice de crecimiento del S&P 500 ha bajado cerca de un 30% este año, mientras que el índice de valor ha caído un 7.9%, con los inversores prefiriendo sectores de alta rentabilidad por dividendo y con ganancias constantes, como el energético.
La atención se ha desplazado ahora a las perspectivas de las ganancias empresariales para 2023, ya que los inversores están cada vez más preocupados por la probabilidad de que haya una fuerte desaceleración económica debido a las subidas de tasas.
«La economía se va a ir a pique porque hemos subido demasiado las tasas. Así que, para cuando llevemos unas semanas (en 2023), vamos a empezar a recibir algunas advertencias sobre los beneficios», dijo Dennis Dick, analista de estructuras de mercado y operador de Triple D Trading.
«La segunda mitad de 2023 será mejor porque creo que la Reserva Federal dejará de subir las tasas de interés. Y también creo que hablarán de bajarlas», agregó.
El dólar se encaminaba el viernes a su mayor subida anual desde 2015, en la última jornada bursátil de un año dominado por las subidas de tasas de interés de la Reserva Federal y el temor a una fuerte desaceleración del crecimiento mundial.
Los índices bursátiles europeos estaban en números rojos en las primeras operaciones del viernes. Las acciones asiáticas subieron en los primeros compases de la sesión, después de que el jueves el ánimo de Wall Street se vio impulsado por datos laborales en Estados Unidos que sugirieron que las alzas de tasas de la Fed están reduciendo la demanda de mano de obra.
Los operadores también se centraban en las perspectivas de China. El optimismo sobre la reapertura del país después de tres años de estrictas restricciones se vio atenuado por el aumento de las infecciones de COVID-19, que amenazan con más trastornos económicos.
En una jornada de escasas operaciones, el índice dólar bajaba cerca de un 0.1%, a 103.90 unidades.