Washington.- Los negociadores demócratas dijeron el viernes al presidente Joe Biden que están “avanzando de manera constante” en las conversaciones con los republicanos destinadas a evitar una cesación de pagos de Estados Unidos, según un funcionario de la Casa Blanca.
Biden recibió una actualización sobre las conversaciones con los asesores del presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy, el viernes por la mañana en Japón, donde se encuentra de viaje para la cumbre del Grupo de los Siete (G7), dijeron funcionarios.
“El equipo del presidente le informó de que se hay avances constantes”, según uno de los funcionarios, que no quiso que se le mencionara.
“El presidente pidió a su equipo que siguiera presionando para lograr un acuerdo bipartidista y dejó clara la necesidad de proteger los programas esenciales para los trabajadores estadounidenses y el progreso económico de los últimos dos años, a medida que las negociaciones avanzan”, dijo.
“Confía en que el Congreso tomará las medidas necesarias para evitar la cesación de pagos”, agregó.
Los republicanos se han negado a votar un aumento del límite de endeudamiento sobre los 31,3 billones de dólares, a menos que Biden y sus colegas demócratas acepten recortes de gastos en el presupuesto federal.
El Gobierno de Estados Unidos podría incumplir el pago de algunas deudas ya el 1 de junio, a menos que el Congreso vote para elevar el techo de la deuda, y los economistas temen que el país caiga en una recesión.
Biden acortó su viaje a Asia y ahora planea regresar a Estados Unidos el domingo para terminar las negociaciones, eliminando las paradas en Papúa Nueva Guinea y Australia, destinadas a contrarrestar la influencia de China en la región.
En tanto, el asesor de la Casa Blanca Steve Ricchetti, la directora de presupuesto Shalanda Young y la asesora legislativa Louisa Terrell dirigen las conversaciones por parte del gobierno.
Un enfrentamiento similar en 2011 sobre el límite de la deuda llevó a una rebaja histórica de la calificación crediticia de Estados Unidos, provocando una venta masiva de acciones y elevando los costos de endeudamiento del Gobierno.
El estancamiento actual ha puesto nerviosos a los inversores, haciendo que el costo de asegurar la exposición a la deuda pública estadounidense alcance máximos históricos.
Según una encuesta de Reuters/Ipsos realizada el lunes, tres cuartas partes de los estadounidenses temen que un impago afecte gravemente a familias como la suya.