Moscú.- El Presidente ruso, Vladimir Putin, dijo el martes que los riesgos inflacionistas están aumentando y pidió al Gobierno y al Banco Central que mantengan la situación bajo control.
La amenaza de que el aumento de los precios erosione el nivel de vida preocupa a Putin, que se prepara para lanzar una esperada candidatura a la reelección el próximo marzo para seis años más en el Kremlin.
Al mismo tiempo, el presupuesto está bajo presión por lo que Putin llama su «operación militar especial» en Ucrania, y el Banco Central se vio obligado a subir las tasas de interés la semana pasada para frenar la caída del rublo.
«La escala y la complejidad de las tareas que estamos resolviendo, y que seguimos resolviendo, son de una naturaleza realmente excepcional», dijo Putin en declaraciones televisadas a los funcionarios del Gobierno.
La situación general es estable, pero requiere un seguimiento vigilante y decisiones oportunas, indicó.
Tras una inflación de dos dígitos en 2022, el ritmo de subida de los precios disminuyó en la primavera boreal, pero la inflación vuelve a estar por encima del objetivo del 4% del Banco Central y aumenta sin cesar.
El creciente déficit presupuestario ruso y la gran escasez de mano de obra han contribuido a aumentar la presión inflacionista durante todo el año. Cuando el rublo superó las 100 unidades por dólar la semana pasada, el Banco Central se vio obligado a responder subiendo las tasas en 350 puntos básicos, hasta el 12%.
Putin declaró que la volatilidad de los mercados financieros había dificultado las decisiones de inversión de las empresas y era algo que había que controlar.