Londres.- Los precios del oro operaron estables el viernes, cerrando al alza la semana, ya que el dólar y el rendimiento de los bonos del Tesoro se debilitaron en medio de crecientes expectativas de que la Reserva Federal haya terminado con su endurecimiento de la política monetaria.
A las 1458 GMT, el oro al contado cotizó estable a 1.980,10 dólares la onza, tras tocar máximos de dos semanas y culminando un avance semanal del 2,3%. Los futuros del oro en Estados Unidos cedían un 0,2%, a 1.982,80 dólares.
«Existe un gran potencial para que el oro siga subiendo un poco más, pero los precios tienen que bajar algo antes de que se produzca la siguiente subida y, quizás, probar el nivel de los 2.000 dólares al mismo tiempo», dijo Everett Millman, de Gainesville Coins.
«Los datos publicados esta semana han confirmado que la Fed ha dejado de subir las tasas, lo que ha ayudado al oro. El movimiento del oro dependerá de los datos que lleguen y de la respuesta del mercado a los mismos», agregó.
Esta semana, el índice de precios al consumidor en Estados Unidos se mantuvo sin cambios en su lectura de octubre y otro conjunto de informes destacó que el número de estadounidenses que presentaron nuevas solicitudes de subsidios de desempleo aumentó más de lo esperado la semana pasada.
Los datos apuntan a una desaceleración de la inflación, por lo que el mercado prevé un recorte de tasas en mayo. La reducción de los tipos ejerce una presión a la baja sobre el dólar y el retorno de los bonos, aumentando el atractivo de los lingotes, que no devengan intereses.
El dólar se encaminaba a un descenso semanal, mientras que el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años también retrocedía.
En otros metales preciosos, la plata al contado bajó un 0,1%, a 23,69 dólares la onza, cerrando la semana con un alza del 6,9%; el platino operó estable a 892,71 dólares, avanzando un 6,8% en la semana; y el paladio restó un 0,2%, a 1.056,31 dólares, en su mejor semana en más de un año.