Nueva York.- Wall Street y el rendimiento de los bonos referenciales del Tesoro estadounidense subían el jueves, tras sólidos datos del mercado laboral que debilitaban las apuestas de que la Reserva Federal empezará a rebajar en marzo su tasa de política clave.
Los índices S&P 500 y Nasdaq avanzaban, liderados por los valores tecnológicos y afines, mientras que los sectores más defensivos mantenían al Dow Jones prácticamente plano.
Un informe del Departamento de Trabajo mostró que las solicitudes iniciales de subsidios de desempleo cayeron a su nivel más bajo desde septiembre de 2022, lo que arroja más dudas sobre si la Fed recortará su tasa objetiva de los fondos al término de su reunión de política monetaria de marzo.
Esto, sumado a los temores de una escalada de los conflictos en Oriente Medio, contribuía a mantener la presión alcista sobre el rendimiento de los bonos.
«En los últimos días, los datos económicos han estado mostrando signos de resistencia», dijo Greg Bassuk, de AXS Investments en Nueva York. «Y la ironía es que, mientras que la economía más fuerte de lo previsto es buena para las empresas y los inversores, está echando agua fría sobre las expectativas de que tengamos un recorte de tasas en marzo».
«Así que hay inversores tanto alcistas como bajistas que se mantienen al margen, realmente centrados en los datos económicos, sabiendo que eso es lo que realmente va a impulsar la política de la Fed en 2024», añadió.
Los mercados financieros están valorando en un 55,7% la probabilidad de que la Fed recorte las tasas en marzo, frente al 70,2% de hace una semana, según la herramienta FedWatch de CME.
Las acciones europeas avanzaron, impulsadas por unos resultados alentadores. El índice paneuropeo STOXX 600 ganó un 0,6% y la medida de acciones mundiales de MSCI mejoraba un 0,46%.
Los valores de los mercados emergentes subían un 0,36%. El índice más amplio de MSCI de acciones de Asia-Pacífico excluyendo Japón ganó un 0,38%, mientras que el Nikkei japonés cedió un 0,03%.
El rendimiento de los bonos recibía el impulso de los sólidos datos de empleo. Los papeles referenciales a 10 años restaban 4/32 en precio, al 4,119%, mientras que los de 30 años bajaban 16/32, al 4,3402%.
El dólar operaba estable cerca de un máximo de cinco semanas frente a una cesta de divisas mundiales. El índice dólar cotizaba plano y el euro cedía un 0,24%, a 1,0855 dólares. El yen operaba estable a 148,15 unidades por dólar y la libra esterlina tampoco mostraba apenas cambios, a 1,2675 dólares.
Los precios del crudo mejoraban más de un 1% después de que la Agencia Internacional de la Energía (AIE) se hiciera eco de las previsiones de la OPEP+ sobre la fuerte demanda mundial de petróleo este año, mientras los riesgos geopolíticos en Oriente Medio mantenían la preocupación por la oferta en primer plano.
El oro cotizaba al alza, ya que las crecientes preocupaciones geopolíticas aumentaban el atractivo del metal dorado como refugio. El oro al contado avanzaba un 0,4%, a 2.013,59 dólares la onza.