Miedo a los desastres, a la corrupción y al populismo de funcionarios y políticos
Guillermo Correa
Como si hubiera sucedido ayer, muchos mexicanos del centro y sur de la República todavía padecemos los movimientos de la tierra que ya no se dan con la fuerza que sorprendió en septiembre aunque parece. La angustia, el miedo se encuentra principalmente entre los que más sufrieron la muerte y conmoción de familiares. El temor camina y se apodera de uno al observar en nuestro hábitat la destrucción causada por los sismos recientes. Pero ese pavor a lo desconocido aumenta con lo que sí se sabe al ver el actuar de quienes mandan porque gozan de un poder político siempre repudiado. Son los populistas de todas las corrientes políticas que ante la tragedia del pueblo dicen, por ejemplo, que con el año nuevo habrá casa nueva. Y para convencer muestran los recursos que en solidaridad se han enviado en apoyo a los desprotegidos que en segundos perdieron su patrimonio. Dinero del que todos hablan y se disputan su repartición —partidos, gobierno, iniciativa privada—pero que pocos saben dónde está.
Lo cierto es que son muchas las naciones, instituciones internacionales, personajes del deporte y de la farándula de todo el mundo los que se han mostrado generosos con México, no así los que se dicen mexicanos y presumen de gobernar las entidades impactadas por los terremotos que han dejado un saldo general de más de 360 muertos y miles de damnificados. Para empezar hay que señalar que como el país es víctima preferida de los desastres naturales que se han agudizado con el cambio climático, no termina de reconstruirse una región afectada cuando ya se tiene encima otro huracán, la tormenta tropical, sequías que no faltan o los impredecibles temblores, al grado de que se puede asegurar que todavía hay damnificados de fenómenos que pasaron hace años, mexicanos que siguen esperando se cumplan las promesas de los que administran los recursos.
Hace diez años sucedió con Paulina y Gilberto, luego Kenna, Stan, Emily e Isidoro. Y así podemos seguir con temblores e inundaciones con su estela de muertos, viviendas, hoteles, playas y campos destruidos. Es como una película que periódicamente se presenta con escenarios destrozados y funcionarios rodeados de reporteros y cámaras, de televisión principalmente, que como estrellas aparecen en noticieros llenos de morbo que repiten y repiten las escenas, entre intervalos de comerciales con anuncios de productos chatarra y de empresas que imponen récords con sus ventas y condicionan la solidaridad que ofrecen. Claro que esto no puede durar más de un mes, como sucede ahora que los funcionarios se van de las zonas dañadas y otra vez las poblaciones quedan en el olvido.
Al tiempo que sufren las poblaciones, casi todas ellas del sector rural, por la ayuda que se disipa –más cuando se la roban los gobernantes–, las organizaciones campesinas empiezan a preocuparse porque saben que si de recortar recursos se trata para supuestamente dárselos a otros a través de programas que poco se cumplen, a los primeros que les quitarán son a los productores del campo que así lleva doble castigo: afectados por los desastres y luego por el gobierno. Es el caso que advierte Raúl Pérez Bedolla, de la Alianza Campesina del Noroeste (ALCANO) y pide al gobierno hacendario no caer en esa tentación con el argumento de que no hay mucho para enviar a los paisanos de Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Morelos, Puebla y Tlaxcala. Recuerda que el presupuesto de la SAGARPA va en picada desde 2015 en que llegó a 92 mil 142 mil millones de y para el 2018 se proponen recursos por un total de 64 mil 325 millones de pesos.
El dirigente acusa que de los 32 gobernadores que han administrado el país a la par del sexenio del Presidente Enrique Peña Nieto, sólo entre los 22 que son del PRI han desviado alrededor de 258 mil 829 millones 185 mil pesos de los recursos públicos, de acuerdo con denuncias penales y resultados de la Auditoría Superior de la Federación (ASF). Recursos que podrían solucionar el problema de la reconstrucción de las entidades dañadas y no recortando recursos para el sector agrícola mexicano. Su demanda entonces se suma a la de muchos otros: recortar presupuesto a partidos políticos y al INE a los que Hacienda pretende dar 25 mil millones de pesos para el próximo año con motivo de las elecciones en las que se incluye el cambio presidencial. Pide también disminuir sueldos de Magistrados y Jueces del Poder Judicial de la Federación, a diputados y senadores.
Lo anterior es necesario para garantizar la economía rural e indígena de las comunidades que se han quedado sin nada, de lo contrario habrá migraciones masivas en busca de la sobrevivencia ya que con lo sucedido aumentará la pobreza alimentaria y patrimonial. Esta es la consideración de Rocío Miranda Pérez, presidenta de la Unidad de la Fuerza Indígena y Campesina (UFIC), quien demanda un Plan Integral de Reconstrucción con visión de Usos y Costumbres de las etnias afectadas porque no solo perdieron a familiares, casas o herramientas artesanales o agrícolas, sino que están en riesgo de que pase lo mismo con su cultura y organización de economía social. Sin embargo, visualiza en el sureste del país una pobreza acentuada y hasta regiones en el olvido o quizás peor: esclavizadas con todas las empresas que llegarán a apoderarse de los recursos naturales amparadas bajo el Programa de las Zonas Económicas Especiales echado a andar en la presente administración.
En opinión de José Sergio Barrales, rector de la Universidad Autónoma de Chapingo (UACH), lo que urge es acabar con el paternalismo gubernamental –léase populismo— de entrega de despensas en zonas rurales afectadas por sismos y huracanes cuando lo urgente es reactivar la producción alimentaria local con semillas nativas y garantizar techos a los afectados. Hay que difundir los huertos familiares, darles techos estructurales con captación de agua de lluvia para uso agrícola y doméstico. Auxiliar realmente a los más necesitados y no a los caciques regionales.
Sin embargo, el Frente Auténtico del Campo (FAC) anunció una Jornada Nacional de Movilizaciones debido a la negativa de la SAGARPA (José Calzada Rovirosa) y la SEDATU (Rosario Robles Berlanga) de pagar acuerdos comprometidos, incluida la entrega de recursos de Vivienda Rural y PIMAF, pues esos recursos ya estaban aprobados y ni un peso ha llegado a Oaxaca y Chiapas, entidades dañadas por los recientes sismos. Por ello exigieron detener las giras de trabajo de los secretarios en dichas entidades federativas ya que sólo son gastos inútiles en viáticos sin que se demuestre la reconstrucción. Tras el anuncio de las movilizaciones, los dirigentes Marco Antonio Ortiz Salas y Francisco Chew Plascencia informaron de que hay la promesa de que ahora sí el gobierno va a cumplir con sus compromisos. Lo que se duda porque en cada manifestación se dice lo mismo y el caso es que los adeudos son del año que está por finalizar y no son unos cuantos, se trata de la mitad que se pactó con anterioridad. Hasta ayer seguí el plantón frente a las instalaciones de la Secretaría de Agricultura y en otras de provincia. En todo caso, los campesinos se irán y pronto regresarán por el mismo y otros reclamos.
Como el que se dio a conocer en las redes desde el Istmo de Tehuantepec y que tiene que ver con la ayuda gubernamental. Se trata de los voluntarios que participan en el Censo Oficial de las Viviendas Afectadas por el Sismo. Dice: Me siento sumamente triste, decepcionado y encabronado de ver cómo el FONDEN –Fondo Nacional para los Desastres Nacionales– todos estos disque «apoyos» federales son pura pinche mentira. Funcionan exactamente igual que una aseguradora que hace todo lo posible para no pagarle a los afectados, incluso peor. Nos pasaron la lista de todos los requisitos que se deben cumplir para hacerse acreedores al apoyo, y dicha lista es una verdadera burla. Estos hijos de su puta madre utilizan hasta el más mínimo pretexto para «justificar» que la inmensa mayoría de los damnificados no sean candidatos a recibir el apoyo. Los únicos que podrán recibirlo serán los dueños que estén al corriente en prácticamente todos los trámites burocráticos que existen.
Los afectados que tengan la más mínima falla en cualquiera de los requisitos quedarán automáticamente descartados por el sistema, Es más, si el voluntario encargado de realizar el censo comete cualquier error al escribir la dirección de la propiedad y esta no coincide perfectamente con la que ellos tienen en el sistema, todo queda automáticamente descartado. Para que me entiendan, si el voluntario pone que la propiedad está en la «Calle Benito Juárez» y en el sistema ellos tienen que no es «calle» sino «privada», «cerrada», «avenida», o cualquiera de las variantes, el apoyo queda cancelado.
También nos dijeron que el apoyo podría tardar en llegar hasta 36 meses. Que los apoyos no serán económicos, sino en especie (costales de cemento). Y que a quienes perdieron su casa por completo, solamente se les podrá ayudar con el 30 por ciento del valor que ellos mismos calculen de la propiedad. Esto significa que si eres un ciudadano ejemplar y totalmente responsable que está al corriente en absolutamente todos los trámites burocráticos que existen y perdiste por completo tu casa, el máximo apoyo que podrás recibir será el de los costales de cemento proporcionales a ese porcentaje del valor que se calcule de tu propiedad, mismos que pueden tardar en llegar hasta 36 meses».
DESDE EL CENTRO
Precisamente desde Oaxaca se anunció que en la reactivación económica de los 41 municipios afectados por los sismos en la región del Istmo de Tehuantepec, la SAGARPA destinará más de 30 millones de pesos a fin de reforzar la economía del sector ganadero en la zona…También que el Gobierno de la República puso en marcha un Programa de Reconstrucción del Aparato Productivo en Materia Agroalimentaria con más de 100 millones de pesos por parte de la misma dependencia…Todo parece que el TLCAN tiene sus días contados si la firmeza de la parte mexicana no se afloja por los impuestos que quiere cobrar Estados Unidos a las exportaciones de hortalizas… Al no soportar más los multiplicados casos de corrupción que se han manifestado tras el sismo en la capital de la República, la COPARMEX de la CDMX quiere que, como en Perú, se decrete la Ley de Muerte Civil o Política para los corruptos de todos conocidos…Y el Muro va.
