Juan Barrera Barrera
¿Simples elogios o destape de José Antonio Meade? El día de ayer el canciller Luis Videgaray se desbordó en elogios hacia el secretario de Hacienda: “Es para mí un honor presentar a uno de los mexicanos más talentosos, más preparados, con una trayectoria impecable, que ha sido protagonista de las transformaciones y de los éxitos de la política pública en México en las últimas décadas. El único mexicano, junto con Plutarco Elías Calles en haber ocupado cuatro secretarías distintas en dos gobiernos diferentes y que hoy conduce con gran inteligencia, patriotismo y visión de Estado… Puedo ser testigo fiel no solamente de su inteligencia notable, de su extraordinaria preparación y experiencia, pero sobre todo de sus valores, siendo el más importante de todos la integridad y el patriotismo”.
No es ninguna casualidad de que conforme se acera el calendario electoral para el registro de precandidatos e inicio de precampañas, 14 de diciembre, un personaje como el secretario de Hacienda, el más cercano al presidente Enrique Peña Nieto, haya ensalzado las cualidades de su ex compañero de banca en el Instituto Tecnológico Autónomo de México como delineando el perfil del próximo candidato presidencial del partido tricolor.
En vísperas de la designación de quien será el representante del PRI en los comicios presidenciales del 2018 (cobra fuerza la versión de que será a principios de la próxima semana), el titular de Relaciones Exteriores ante el cuerpo diplomático acreditado en México, destacó la trayectoria impecable de Meade, quien en los sondeos de opinión se encuentra muy por debajo del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.
Destape priísta adelantado
Por la forma en que Videgaray resaltó la hoja de servicios de Meade Kuribreña, no es posible creer que lo hace a iniciativa personal, o porque sea partidario de que el eficiente funcionario de las finanzas sea el elegido a candidato del partido tricolor. No, es un mensaje de su jefe, el presidente Peña Nieto, que sigue jugando, al estilo de Adolfo Ruiz Cortines, con su proceso de sucesión presidencial, fiel al guión que marca el ritual priísta, del viejo PRI que nunca se ha ido.
Luis Videgaray perdió hace tiempo la posibilidad de estar en primera fila a suceder a Peña Nieto, de quien ha sido su principal consejero desde que era gobernador del estado de México. Videgaray es a Peña Nieto lo que José Córdoba Montoya era a Carlos Salinas de Gortari. Es altamente la dependencia intelectual del representante del Ejecutivo lo que le otorga la distinción de “destapar” al posible sucesor, que en otros tiempos le correspondía a Fidel Velázquez, dirigente sempiterno de la CTM y después a la CNC y…
Videgaray o el minimato
Luis Videgaray no será presidente de México, pero ha sido el poder tras el poder durante la administración peñista y acaso pretende extender ese poder transexenal en caso de que José Antonio Meade sea el elegido del “dedazo”, cabe la posibilidad, tomando en consideración que el responsable de las finanzas nacionales no es un político, sino un eficiente tecnócrata, y Videgaray como experimentado político haría las veces de vicepresidente, o dicho de otro modo, sería el jefe mínimo, porque Meade no es ni candidato, ni presidente, como el jefe máximo.
Durante el encuentro con los diplomáticos acreditados en México, se podría afirmar que el canciller mexicano hizo gala de ignominia, hasta el extremo de hacer un paralelismo entre la persona de José Antonio Meade con Elías Calles, fundador del PRI, al cual el secretario de Hacienda no pertenece, pero tiene muchas posibilidades de ser señalado por el dedo índice del Presidente, aunque con escasas posibilidades de triunfo, a juzgar por las encuestas en las que todas dan por ganador a Andrés Manuel López Obrador.
Los dichos por Videgaray Caso sobre José Antonio Meade en la sede de Relaciones Exteriores el miércoles, es igualmente un mensaje hacia el responsable de la política interior, Miguel Ángel Osorio Chong, quien coincidentemente en ese momento comparecía en la Cámara de Senadores, en donde fue duramente cuestionado por la oposición debido a los altos índices de violencia y muertes sin paralelo en décadas pasadas.
La seguridad pública y la política de derechos humanos son dos temas que la administración de Peña Nieto arrastra como talón de Aquiles que le pega directamente en la imagen del hidalguense por ser el responsable. Osorio Chong había observado una recuperación en las semanas recientes, pero con la situación de inseguridad y el mensaje de Videgaray, con quien mantiene distancia, es posible que sus aspiraciones para este momento ya estén canceladas.
Pero si fue un destape para quemar a Meade Kuribreña y Osorio Chong descartado, entonces despejado el terreno Aurelio Nuño aparecería como tercero en discordia, porque después de los tres quién más, no importa el perfil de ganador y capaz para gobernar.