Bruselas.- Las acciones europeas cerraron ligeramente a la baja el viernes, restándole brillo a una escalada del 7% esta semana, ya que los inversores se centraron en los crecientes casos de coronavirus en el continente y la incertidumbre en torno a las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
El referencial paneuropeo STOXX 600 cayó un 0,2% después de una racha ganadora de cinco días que marcó la mejor semana del índice desde inicios de junio.
Provocando un fuerte repunte en las acciones mundiales, los inversores apuestan a que el demócrata Joe Biden se convertirá en el próximo presidente de Estados Unidos, pero los republicanos mantendrán el control del Senado, lo que podría retrasar importantes cambios de política, incluido un escrutinio más estricto de las grandes empresas estadounidenses.
“Persisten las dudas de que el resultado final podría terminar en los tribunales de Estados Unidos”, escribió en una nota Michael Hewson, analista jefe de mercado de CMC Markets. “Por ahora, los mercados financieros no parecen estar demasiado preocupados, sin embargo, aún parece prudente sacar algo de dinero de la mesa a medida que nos acercamos al fin de semana”.
Mientras, Italia registró su cifra diaria más alta de casos de coronavirus, y la región norte de Lombardía sigue siendo la zona más afectada.
Las acciones de la aerolínea Lufthansa cayeron un 6,9%, ya que Alemania advirtió contra los viajes innecesarios a Dinamarca, Italia y varios otros países.
La aerolínea británica easyJet bajó un 2,6% después de que dijera que los cierres anunciados recientemente en Inglaterra, Alemania y Francia la habían obligado a recortar aún más su ya reducido cronograma de vuelos.
Los fabricantes de automóviles fueron los que más descendieron, con un 1,7%, después de subir esta semana con la esperanza de que una victoria de Biden pudiera llevar a una postura más suave sobre las políticas comerciales.
Las aseguradoras recibieron un impulso después de que la alemana Allianz informara un sorpresivo aumento del 6% en las ganancias netas del tercer trimestre. Un acuerdo multimillonario que involucró a RSA, la aseguradora canadiense Intact Financial y la danesa Tryg también impulsó el sector.