Washington.- Los propietarios en Estados Unidos de vehículos Tesla están sustituyéndolos por los de otras marcas más que nunca mientras que el consejero delegado de la compañía automovilística, Elon Musk, incrementa su relación con el Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, según datos de la firma Edmunds.
Edmunds, que proporciona información e investigación sobre el sector del automóvil, señaló que en marzo la proporción de propietarios de Tesla que acudieron a los concesionarios de marcas rivales para cambiar sus vehículos por otros se situó en la «cuota más alta» nunca alcanzada.
En declaraciones este viernes a la cadena de televisión CNBC, Jessica Caldwell, directora de estudios de Edmunds, dijo que «el cambio en el sentimiento del consumidor hacia Tesla puede crear oportunidades para que los fabricantes tradicionales y las nuevas empresas de vehículos eléctricos ganen terreno».
Los datos de Edmunds indican que mientras que en marzo de 2024 sólo un 0,4 % de todos los vehículos cambiados por otros de marcas rivales eran Tesla, hasta mediados de marzo de 2025 la cifra se había incrementado al 1,4 %.
Además, Edmunds también destacó que en su web la actividad de busca de modelos de Tesla se ha reducido a su nivel más bajo desde octubre de 2022.
Los datos de Edmunds coinciden con el nombramiento de Musk al frente del polémico Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, en inglés), una entidad que ha impulsado la eliminación de agencias federales y el despido de miles de empleados públicos.
Musk, cuya inmensa fortuna está ligada hasta ahora a Tesla, también ha multiplicado controvertidas declaraciones y apoyo a partidos políticos de extrema derecha en Europa y el continente americano.
El pasado jueves, además, numerosos vehículos de la empresa de Musk en Canadá sufrieron actos de vandalismo desde que Trump inició la guerra arancelaria y amenazó con la anexión de su vecino del norte.