Ciudad de México.- El exsubsecretario de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía (SE), Francisco Rosenzweig, confió en que la OMC dé en seis meses la razón a México para comercializar los productos de atún en el mercado estadounidense, pues cumple con los más altos estándares internaciones para la protección de los delfines.
En consecuencia, indicó, la Organización Mundial del Comercio (OMC) debe reconocer que las medidas adoptadas por Estados Unidos son “insuficientes” respecto al problema del etiquetado del atún “Dolphin safe” (Delfín a salvo).
Esto, porque la SE informó que apelará la resolución de dicho organismo internacional, en la cual advierte que la regulación estadounidense no discrimina al pescado mexicano después de los cambios hechos en marzo de 2016.
Rosenzweig dejó en claro que no se trata de un fallo, sino de una notificación que la OMC recibió de Estados Unidos sobre las modificaciones realizadas en su regulación a partir de la resolución emitida hace dos años en favor de México.
Aquella resolución estableció que nuestro país cumple con todas disposiciones, tanto nacionales como internacionales, para garantizar la captura de atún de manera sustentable y sin afectar a los delfines, por lo que Estados Unidos debía hacer las modificaciones pertinentes en nueve meses, expuso.
Sin embargo, el actual socio de la División de Energía, Infraestructura y Proyectos de White & Chase, comentó que el país vecino no cumplió porque el pescado mexicano sigue sin entrar a ese mercado y, ante ello, el gobierno mexicano solicitó la suspensión de beneficios.
“Lo que Estados Unidos debe hacer es informar sobre las medidas que llevó a cabo para dar cumplimiento a la OMC, mas no es un fallo a favor de ese país ni que este fallo haya quedado rebasado”, argumentó.
“Mientras la situación no quede resuelta, México seguirá apelando el fallo de hace dos años para que le dé la razón”, insistió Rosenzweig, al considerar que este nuevo proceso jurídico puede llevar hasta seis meses al resolverse en condiciones ordinarias.
No obstante, el ex funcionario recordó que las pérdidas ascendían a más de 430 millones dólares anuales para el sector atunero, cuando nuestro país solicitó la suspensión de beneficios hace dos años.
En fechas recientes, la industria atunera mexicana de la Alianza del Pacífico por el Atún Sustentable (PAST) recibió la certificación de la organización internacional Marine Stewardship Council (MSC) por implementar prácticas de pesca responsable y sustentable.
Al ser considerada como el máximo reconocimiento ambiental en su tipo a nivel mundial, Rosenzweig acentuó que éste favorce el cumplimiento cabal de México con las disposiciones y las mejores prácticas internacionales en dicha materia.
Al cuestionarlo sobre el hecho que esta impugnación se dé en el marco de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), respondió que son temas diferentes y, de ninguna manera, deben vincularse.
“Son temas que corren por carriles separados y no tiene por qué haber una mezcla o una asociación a una negociación de un tratado de libre comercio, que es un proceso mucho más amplio e integra a tres países, con un tema bilateral y un producto que requiere la intervención de la OMC”, concluyó.