Riad.- El ministro de Energía saudí, Abdulaziz bin Salman, anunció este lunes el descubrimientos de siete yacimientos de gas natural y petróleo con una capacidad total de producción de más de 28 millones de pies cúbicos diarios de gas y más de 11.000 barriles de crudo, informó la agencia oficial de noticias saudí SPA.
El ministro explicó que los nuevos yacimientos fueron descubiertos por la petrolera saudí Aramco, la más importante del mundo, en el este y el sureste del reino árabe, según la agencia.
«La compañía petrolera de Arabia Saudí pudo descubrir dos yacimientos de petróleo no convencional, un pozo de petróleo ligero árabe, dos yacimientos de gas natural y dos fuentes de gas natural de un mismo pozo», destacó SPA.
Señaló que, en la región oriental del país, se han descubierto dos yacimientos de petróleo no convencional; el primero en el pozo ‘Ladam-2’, con capacidad de 5.100 barriles diarios y 4,9 millones cúbicos diarios de gas, y el segundo en el pozo ‘Al Faruk-4’, que generó 4.557 barriles de petróleo y 3,79 millones cúbicos diarios de gas.
Otro descubrimiento se dio en el pozo ‘Mazaliy-62’, con una producción de 1.780 barriles diarios de petróleo ligero y sólo 0,7 millón cúbico diario de gas.
La agencia señaló que en la zona de Rub al Jali, en el sur del país y uno de los mayores desiertos de arena del mundo, se han descubierto dos fuentes nuevas de gas natural en el mismo pozo ‘Al Yahaq-1’; una produce 5,3 millones cúbicos diarios de gas y la otra 1,1 millón cúbico.
Apuntó que se descubrió un nuevo punto de extracción de gas de pozo ‘Al Katuf-1’, con una capacidad de producción 7,6 millones cúbicos diarios de gas; y otro de 4,9 millones cúbicos diarios de gas en el pozo ‘Asikra-6’, ambos situados también en Rub al Jali.
El anuncio de estos descubrimientos se da un día después de la firma de la petrolera estatal saudí Aramco de contratos por importe de más de 25.000 millones de dólares para la expansión de su red principal de gas y para el desarrollo de la segunda fase del yacimiento gasístico de Al Jafurah.
Arabia Saudí lleva años tratando de diversificar su economía, fuertemente dependiente del petróleo, y buscando nuevas formas de generar energía, principalmente todas aquellas relacionadas con el gas y el hidrógeno.