Fráncfort.- Audi, la marca de Volkswagen, está reteniendo en los puertos estadounidenses los coches que llegaron después del 2 de abril, cuando Donald Trump anunció un arancel del 25% sobre las importaciones de vehículos, dijo este lunes la compañía, mientras las empresas se esfuerzan por averiguar cómo se verán afectadas por los aranceles.
La marca Volkswagen tiene alrededor de 37,000 vehículos en su inventario estadounidense, suficientes para aproximadamente dos meses de ventas, añadió el portavoz.
Audi está directamente en la línea de fuego de los aranceles de Trump, ya que su modelo más vendido en Estados Unidos, el Q5, se produce en México, y el resto de sus modelos proceden todos de Europa o de otros lugares.
La marca envió un memorándum a los concesionarios, del que informó por primera vez la publicación especializada estadounidense Automotive News, diciendo que congelaría los envíos a partir del 2 de abril hasta nuevo aviso, dijo un portavoz.
Según datos del proveedor de servicios de automoción Cox Automotive, las automotrices tienen un promedio de tres meses de existencias en Estados Unidos, lo que les da cierto margen para mantener intacto el suministro hasta que establezcan una estrategia a más largo plazo para hacer frente a los aranceles.
Los ejecutivos del sector automotor se reunirán con la presidenta de la UE, Ursula von der Leyen, más tarde este lunes para debatir cómo responder a los aranceles, mientras las acciones europeas caen a mínimos de 16 meses por el temor de los inversores a un aumento de los precios, una menor demanda y una posible recesión mundial.