Londres.- Los precios del cobre registraban el viernes su mayor subida semanal desde principios de enero, ya que los sólidos datos económicos de China, principal consumidor mundial, aumentaban las esperanzas de demanda.
A las 11:35 GMT, el cobre de referencia en la Bolsa de Metales de Londres (LME) subía un 0,7%, a 9.020 dólares la tonelada, acumulando un alza del 3,5% en la semana.
Los precios tocaron un máximo de siete meses de 9.550,50 dólares en enero, pero se estancaron debido a la escasa demanda china y a las expectativas de que la Reserva Federal de Estados Unidos siga subiendo las tasas de interés, lo que frenaría el crecimiento económico e impulsaría al dólar.
Un billete verde más fuerte hace que los metales sean más caros para los compradores que no pagan con la divisa estadounidense y puede suprimir la demanda.
«Hasta que no esté claro que la Fed ha roto el espinazo de la inflación, seguirá siendo difícil que los metales en su conjunto suban de forma sostenida en ausencia de señales claras de riesgo de agotamiento de las existencias», dijeron analistas de Goldman Sachs (NYSE:GS).
Los datos de esta semana mostraron que la actividad de las fábricas chinas aumentó en febrero al ritmo más rápido desde 2012 y que el sector servicios se expandió con rapidez. China podría aspirar a una tasa de crecimiento del 6% en 2023, según dijeron fuentes a Reuters.
En otros metales básicos, el aluminio en la LME subía un 0,6%, a 2.413 dólares la tonelada; el zinc ganaba un 1,2%, a 3.085,50 dólares; el níquel mejoraba un 1,1%, a 24.650 dólares; el plomo avanzaba un 0,7%, a 2.139,50 dólares; y el estaño caía un 1,6%, a 24.180 dólares.
El aluminio, el zinc y el plomo se encaminaban a cerrar la semana al alza, mientras que el níquel se mantenía plano y el estaño retrocedía.