Ciudad de México.- A pesar del entorno económico restrictivo que se gestó en 2017, el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) aumentó 18 por ciento la colocación de crédito al cierre de ese año.
Lo anterior, con una participación similar en la adquisición de vivienda nueva respecto al año previo, pero incrementando el financiamiento hacia inmuebles usados y en mejoramientos habitacionales.
El Infonavit refirió que de acuerdo con “El estado actual de la vivienda en México 2017”, el esquema de crédito en pesos del organismo expandió el tope hasta 1.6 millones de pesos.
El estudio subraya que, por su parte, el Fondo de la Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Fovissste) colocó el año pasado 35 mil millones de pesos en financiamiento, que lo posiciona como un importante dinamizador de la actividad productiva en el sector vivienda.
Por otro lado, en la ejecución de la política pública de vivienda, el estudio expone que la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi) ejerció la totalidad del presupuesto anual, que ascendió a más de cuatro mil 617 millones de pesos, y cuyos recursos sirvieron para atender las necesidades de 101 mil beneficiarios.
A la par de lo anterior, el Fondo Nacional de Habitaciones Populares (Fonhapo), a través del programa “Apoyo a la Vivienda”, otorgó en el referido año más de 106 mil subsidios por un monto de dos mil 168 millones de pesos.
En la misma línea, el Consejo Nacional de Vivienda Verde y Sustentable (Convives) tuvo una participación de 74 por ciento de las acciones realizadas en subsidios de Conavi.
Por su parte, la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF) otorgó más de 93 mil millones de pesos en crédito directo e inducido, y alcanzó un saldo de más de 324 mil millones de pesos, cifra que representó 1.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional.
Respecto al crédito directo para la construcción, el reporte realizado por la Fundación Centro de Investigación y Documentación de la Casa (CIDOC), con la colaboración de SHF, menciona que en 2017 se colocaron más de 19 mil millones de pesos, lo que representó una participación de 25 por ciento del total del financiamiento puente del sector.
Por el lado de la oferta de vivienda, en el periodo 2013–2017 el censo promedio en el Registro Único de Vivienda (RUV) llegó a 27 mil viviendas por mes, en tanto que durante 2017 se registraron 250 mil viviendas, cifra 18.3 por ciento inferior respecto a 2016.
Asimismo, resalta el tiempo total de construcción de vivienda, que pasó de 11.6 meses en 2016 a 13.1 en 2017, derivado del alargamiento de todas las etapas de construcción.
Indica que cerca de 70 por ciento de las familias en rezago al cierre del año pasado tienen ingresos menores a salarios mínimos mensuales, y adelantó que la demanda de soluciones habitaciones financiadas que se esperan para este 2018 serán 7.5 por ciento menores a las de 2017.
Entre los instrumentos de medición, expone que el Índice SHF de Precios de la Vivienda en México demostró una apreciación anual en 2017 de 6.1 por ciento, y otros indicadores seleccionados del mercado como valor y la superficie del terreno, la superficie construida y el valor por metro cuadrado por construcción.
En cuanto a la política de vivienda, el documento destaca que la Nueva Agenda Urbana (NAU) fue adoptada por 167 países, incluyendo a México, en la conferencia Habitat III realizada en Quito, Ecuador.