- El desplome del sector continúa
- Empleo y salarios, bajo el “efecto faro”
- «Los olvidados de Hacienda”
Agustín Vargas *
El sector industrial del país, el segundo más importante para la generación de riqueza y crecimiento de la economía, después del agropecuario (sector primario), continúa mostrando signos negativos, en franca recesión, que difícilmente, según especialistas, se superará este 2020.
En el caso del sector de la construcción, las causas de su descalabro económico son atribuibles completamente al subjercicio presupuestal de 2019 en materia de obra pública, lo que arrastró a esa rama industrial a su peor nivel de los últimos 18 años.
El pasado lunes, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), que preside Eduardo Ramírez, dio a conocer, con base en cifra preliminares, que al cierre de 2001 el sector registró una caída de 6.9% respecto al año previo, la segunda más pronunciada desde el 2001 (cuando se redujo 7.7%).
Según el empresario, se perdieron 152 mil empleos y tuvieron que cerrar algunas empresas, principalmente por el subejercicio de 65% en obra pública. “Habíamos visto subejercicios presupuestales de 30 y 40%, pero no tan altos como el del año pasado. Ahora, queremos ver hacia adelante”, comentó Ramírez.
Se quejó además, de que el panorama en el corto plazo no es halagüeño por la participación, como “competencia”, de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en la construcción del aeropuerto de Santa Lucía, los bancos del Bienestar y demás obras. Hay inquietud en el sector privado que dice estar preparado y capacitado para contribuir a detonar la economía del país con actividad formal.
“Lo dijimos en diversas ocasiones: todos los arranques de gobierno han sido complejos y éste fue un poco más. Es otro régimen y otra forma de actuar. Sí, veíamos que iba a ser más lenta la aplicación de recursos por no tener personal calificado, pero la caída fue muy relevante. Durante el último trimestre pensamos que se iba a acelerar el gasto para alcanzar un subjercicio de 50%, pero no fue posible”, comentó el presidente de la CMIC.
El asunto es que ni el acuerdo de inversión del sector privado anunciado a finales de noviembre ni el adelanto de licitaciones en algunas dependencias lograron atenuar el desplome de la construcción en el primer año de gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador. Un mal inicio de sexenio, sin duda para la infraestructura y lo más preocupante es que incertidumbre económica prevalece.
Efecto faro en empleo y salarios
Los indicadores laborales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que dirige Zoe Alejandro Robledo Aburto, mostraron datos mixtos durante diciembre pasado, pero nada sólidos ni halagüeños para los mexicanos, porque prevaleció la tendencia al desempleo.
Durante diciembre de 2019 el empleo registrado en el IMSS registró una reducción mensual de 382 mil 210 personas debido, principalmente, al factor estacional que suele registrar este indicador en el último mes del año. Con cifras ajustadas por estacionalidad, se estima que el empleo tuvo un aumento de 7 mil 639 personas, el menor en los últimos cinco meses.
La generación de empleos acumulada en 2019 se ubicó en 342 mil 077 personas, la más baja desde 2009.
Por otro lado, el salario de promedio de cotización se ubicó en 378.1 pesos diarios, lo que implica un incremento real anual de 3.8%, el mayor desde mayo de 2002. El aumento de los salarios puede estar relacionado con un posible “efecto faro” del incremento al salario mínimo registrado en enero de este año.
La desaceleración del empleo podría estar relacionada, en parte, con el incremento significativo de los salarios; y, al ser menor que la que registra la actividad, implica que la productividad de la mano de obra continúa disminuyendo.
Por cierto, mañana jueves el titular del IMSS se reúne con los agremiados de la Concamin, que preside Francisco Cervantes Díaz, quien encabeza al poderoso sector industrial del país que representa a 1.2 millones de unidades productivas, el 35% del PIB, el 42% de los empleos formales (8.4 millones de trabajadores permanentes directos) y el 90% de las exportaciones totales del país.
Cambios en la SHCP
Siguen los cambios en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, cuyo titular Arturo Herrera Gutiérrez, pretende fortalecer aún más a esa dependencia y a su equipo de colaboradores.
La dependencia anunció movimiento ahora en el área de Comunicación Social y Vocería, en donde Carlos Cruz dejó ese puesto para integrarse al equipo de Raquel Buenrostro, recién designada jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
El titular de Hacienda decidió ascender de puesto en Comunicación Social a Julieta Brambila, quien era la segunda al mando en esa oficina y desde ayer es la nueva responsable de ese despacho.
De inmediato, la propia Julieta Brambila anunció que se harían algunos cambios en la estrategia de comunicación de Hacienda en aras, por supuesto, de mejorar.
El primer cambio que hizo fue cancelar el “chat” que ella y Carlos Cruz instrumentaron al inicio de esta administración para agilizar la comunicación y el envío de comunicados, videos, anuncios de conferencias, etc., etc. y abrir otro con menos participantes, marginando así a decenas de reporteros.
Esto causó revuelo, molestia y protesta entre los compañeros reporteros de la “fuente”; el enojo fue en aumento durante toda la tarde ayer y ante la falta de una explicación por parte de la nueva responsable de comunicación en la SHCP, varios periodistas decidieron abrir su propio “chat” denominándolo “Los olvidados de Hacienda”. ¡¡¡ Vaya encono !!!
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*Periodista, director de la Revista Hábitat Mx
