Ciudad de México.- La actividad industrial de México sufrió en abril una contracción histórica golpeada por un desempeño negativo de la construcción y del sector manufacturero, estrechamente vinculado con Estados Unidos, debido a los efectos de la pandemia del coronavirus.
El Indicador Mensual de la Actividad Industrial (IMAI) registró una caída real de 25.1% en abril respecto a marzo, según cifras desestacionalizadas divulgadas el jueves por el instituto nacional de estadística, INEGI, mucho más profunda a la contracción de un 15.1% que esperaban los participantes en un sondeo de Reuters.
La actividad manufacturera, el principal motor de las exportaciones mexicanas, cayó un 30.5% frente a marzo, mientras que la construcción retrocedió un 32.8%, mostraron los datos del INEGI.
El declive de la actividad industrial a tasa interanual fue de un 29.6 por ciento, frente a la caída de 20.3% proyectado en el sondeo.
“#IMAI luego de iniciar una tendencia decreciente desde 2018, durante el confinamiento de abril la producción industrial experimentó la mayor contracción de su historia: (-)25.1% m/m y (-)29.6% a/a”, escribió en su cuenta de Twitter el presidente del INEGI, Julio Santaella.
La economía mexicana sufrió en el primer trimestre su peor caída en casi 11 años, de un 1.2% a tasa desestacionalizada, a pesar de que la actividad productiva aún no resentía de lleno los estragos del coronavirus, que hasta ahora ha dejado más de 15,000 decesos en el país.
Capital Economics dijo en un reporte que los datos sugieren “que la economía de México sufrió un fuerte golpe en el segundo trimestre”. “Aumentará la presión para que los responsables de política monetaria respondan con medidas de estímulo adicionales para sacar a la economía de México de este agujero”, añadió.
Analistas del sector privado esperan que la segunda economía de América Latina se contraiga un 8% al cierre de este año, desde una caída estimada previamente del 7.1%, reveló una encuesta del banco central divulgada a inicios de mes.
Mientras tanto, el economista de Goldman Sachs, Alberto Ramos, dijo en una nota a clientes que la producción industrial probablemente tocó fondo en abril, ya que algunos sectores económicos clave están reabriendo gradualmente.
Fabricantes de automóviles, empresas mineras y constructoras han ido reanudando operaciones luego de que México levantó la semana pasada una emergencia sanitaria de dos meses que permite la reapertura de algunos sectores esenciales.
“Sin embargo, la persistente incertidumbre política, el deterioro de la confianza empresarial, la severa disminución de la actividad doméstica y estadounidense, y la creciente expansión de Covid-19 probablemente pesarán en el amplio sector industrial por un tiempo”, dijo Ramos.