Washington.- Los efectos económicos de la emergencia del coronavirus, tanto inmediatos como de corto plazo, continuarán ejerciendo presión sobre las finanzas públicas globales en 2021, en particular en las economías emergentes con cargas de deuda que ya eran elevadas, dijo el martes Fitch Ratings.
La agencia estimó que la recuperación económica global finalmente tomará vigor hacia mediados del 2021, gracias a que el despliegue de vacunas para frenar la pandemia de COVID-19 ahora parece inminente, pero consideró que las implicancias fiscales y económicas del virus probablemente persistirán.
Este año, Fitch tuvo un número récord en rebajas de calificaciones de crédito soberano, más de 30 acciones, una tendencia que estará seguida por más turbulencias en el 2021.
“El mayor número de acciones negativas se situó en la categoría de nota ‘B’, concentrándose en naciones de Latinoamérica y del África subsahariana, pero ningún perfil o región han salido indemnes”, dijo la agencia en su reporte.
Fitch destacó que alrededor de dos tercios de su cartera de perfiles de deuda soberana ahora tienen asignado un panorama negativo.
El actual ciclo está llevando a que muchos países sufran por rebajas de perfiles crediticios de varios escalones.
Si bien los montos de pagos de interés en general parecen manejables a nivel global, el informe apuntó a las notas soberanas de mercados emergentes donde esta carga se ha elevado en promedio en alrededor de 10%, en medio de un mayor grado de relajamiento de la política monetaria y normas más flexibles.
“Fitch cree que será importante explorar esta nueva flexibilización, cuidadosamente”, indicó.