Ciudad de México.- Expertos legales en Derecho aeronáutico y aeroportuario de la firma Santamarina + Steta advirtieron que urgen medidas para evitar un cierre de sexenio sin aeropuertos ni líneas aéreas en México.
“El panorama de la aviación es de verdadero desastre”, dijo Juan Carlos Machorro, al informar que, en el mundo y América Latina, la aviación ha tenido pérdidas con déficits operativos superiores al 90%. “No hay caja que aguante esto.
Por tal motivo es que en Europa y los Estados Unidos, por recomendación de la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), los gobiernos han diseñado paquetes de apoyo que rebasan los 125 billones de dólares en préstamos y dinero fresco. Avianca y Latam solicitaron protegerse con el capítulo 11 de la Ley de Quiebras de los Estados Unidos, en cortes de Nueva York. Aeroméxico tardó porque apostó a un refinanciamiento que no llegó.
El gobierno mexicano no da señales de apoyo. Las líneas aéreas en nuestro país están abandonadas a su suerte”, informó.
El especialista agregó que el panorama se complica porque se están incumpliendo contratos, suspendiendo pedidos nuevos de aeronaves y devolviendo aeronaves a los arrendadores, lo cual impacta, además, a los fabricantes de aeronaves, abonando a la crisis actual de Boeing relacionada con el 737 MAX. Lo anterior, adicionalmente a mayores costos por nuevas medidas sanitarias y de protección ambiental. “Lamentablemente, vemos venir un panorama sombrío sin pasajeros ni aviones, con unas frecuencias de vuelo bajísimas”, subrayó.
Juan Carlos Machorro explicó que, a diferencia de la mayoría de los actores en la cadena de suministro de la industria aérea, los grupos aeroportuarios sí tienen más posibilidad de generar márgenes de utilidad. Por tal motivo es que la IATA hizo proyecciones para una recuperación en el volumen y número de pasajeros para la segunda mitad de 2024 y principios de 2025, bajo la recomendación de que los gobiernos, en lugar de invertir en infraestructura aeroportuaria, apoyen a las líneas aéreas.
“En México -mientras- estamos atorados. Vamos a tener que seguir pagando dinero a los tenedores de bonos del cancelado aeropuerto de Texcoco, e invirtiendo en Santa Lucía, un proyecto que dista mucho de ser operativamente viable para la IATA y líneas aéreas mexicanas y extranjeras.
Corremos el fuerte riesgo de terminar con aeropuertos a medias o vacíos, líneas aéreas quebradas y un aeropuerto Benito Juárez deteriorado, porque para la cancelación de Texcoco, se comprometió la Tarifa de Uso Aeroportuario (TUA)”, concluyó.