Ciudad de México.- Los estados mexicanos más industrializados crecen por arriba de 4.0 por ciento, tasas superiores a los del sur-sureste, los cuales fallaron en la aplicación de una estrategia en favor de impulsar sus sectores transformadores, de acuerdo con el Centro de Estudios de la Industria (CEI).
Destacó que entidades como Aguascalientes, San Luis Potosí, Baja California, Guanajuato, Coahuila, Puebla y Querétaro se mantienen en la parte superior del crecimiento económico, en especial por su fortaleza industrial, un pilar consolidado en función de la atracción de empresas nacionales e internacionales que han invertido en sectores de bajo, mediano y alto valor agregado.
Todos estos estados crecen a tasa superiores al 4.0 por ciento, siendo las manufacturas parte esencial de dicho desempeño, y su historia es de mayor éxito económico.
Por el contrario, precisó, Oaxaca, Tabasco, Guerrero, Chiapas e Hidalgo no sólo concentran la mayor proporción de personas pobres dentro del total de su población, también constituyen a la región que contabiliza tasas de variación negativas en materia de crecimiento económico.
En algunas de estas entidades ya se vive una recesión ocasionada por la falta de inversión en el sector energético, señaló el organismo dependiente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
Apuntó que en estos momentos el problema no es la caída en el precio del petróleo, eso se frenó desde hace más de un año, el desafío que enfrentan es la contracción en inversión para elevar la exploración y producción de energéticos, así como la carencia de una cadena transformadora de dichos insumos.
Esto porque la desindustrialización les cobra la factura de contar con la dotación energética, pero no tener la capacidad de refinarla o transformarla en otros bienes de mayor valor agregado como plásticos, productos químicos o textiles, por citar algunos de los más inmediatos.
De igual forma, enfrentan la consecuencia de no generar energía barata y accesible para industrias como la siderúrgica, la cementera o del vidrio, sectores básicos en el desarrollo económico y social de las naciones más avanzadas, anotó.
Comentó que tampoco han logrado ser atractivas para la maquila, una industria que si bien no genera gran valor agregado, en el corto plazo es fuente de empleo e inversiones que de inicio promueven la construcción y la edificación.