Ciudad de México.- Estados Unidos, México y Canadá están “bastante cerca” de completar el proceso de modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), afirmó hoy el presidente estadunidense Donald Trump.
“Estamos bastante cerca (de completar) el TLCAN… Tenemos una oportunidad de lograr un acuerdo del TLCAN”, subrayó el presidente en un intercambio con reporteros previo a una reunión con miembros de su gabinete.
Trump reiteró sin embargo que “si no logramos el acuerdo apropiado, vamos a terminar con el TLCAN y haremos el acuerdo apropiado después de eso”.
Canadá, Estados Unidos y México celebraron la pasada semana en Washington un encuentro a nivel ministerial después de que los tres países han sostenido siete rondas formales de negociaciones para modernizar el acuerdo en vigor desde 1994.
“El TLCAN fue un acuerdo horrible, lo estamos renegociando, vamos a ver qué pasa”, apuntó Trump, quien también habló de sus relaciones comerciales con China y con Corea del Sur.
Trump calificó a los granjeros estadunidenses como “patriotas” luego que China amenazó con imponer barreras comerciales a productos exportados por algunos estados agrícolas que votaron por Trump en 2011.
Por la mañana, el secretario mexicano de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, dijo que existe una probabilidad del 80 por ciento de tener un acuerdo en principio sobre el TLCAN a más tardar en la primera semana mayo.
Guajardo señaló que “hay una altísima probabilidad, un 80 por ciento” de tener un acuerdo en principio a más tardar la primera semana de mayo, y después de 30 días una eventual firma, pero sostuvo que ello va a depender de la flexibilidad.
Guajardo mencionó que la negociación tiene un tiempo natural desde el punto de vista de la autoridad de promoción comercial de Estados Unidos e indicó que si “no logran amarrar un acuerdo a más tardar para la primera semana de mayo, ya los tiempos para negociar que le da el Congreso no le permitirían llevar este acuerdo a voto”.
La llamada Autoridad de Promoción Comercial (TPA), conocida como Vía Rápida (Fast Track), permite al ejecutivo estadunidense negociar acuerdos comerciales que después sólo pueden ser objeto de un voto afirmativo o negativo en el Congreso, pero sin enmiendas.
La TPA actual expira el primero de julio, pero la administración Trump pidió en marzo al Congreso una extensión de tres años.