Contratos fantasma que realizó Fonatur para Tren Maya
Norberto Vázquez
El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) es un fideicomiso creado mediante publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 28 de enero de 1974 y formalizado mediante un contrato de fideicomiso el 29 de marzo del mismo año, en el que participa la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, como fideicomitente único, y Nacional Financiera, como institución fiduciaria.
Bajo un largo trecho de modificaciones legales, la 4T lo usó para construir parte del Tren Maya. Todo un disparate legal, debido a que conforme al decreto publicado en el DOF el 31 de agosto de 2023, el Fonatur entregó el proyecto Tren Maya a la empresa Tren Maya, SA de CV, a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Pero una clásica de gobiernos corruptos: todos los secretos para contratar a empresas se quedaron el tintero, pero si fluyó mucho dinero público entre Fonatur y varias empresas públicas y privadas que convinieron de manera irregular y sin saber cuál era el objetivo de esas contrataciones.
Desde el 22 de febrero de 2001, el Fonatur se encuentra bajo la coordinación sectorial de la Secretaría de Turismo. Cuenta con empresas filiales que lo auxilian en el desarrollo de sus actividades, dentro de las cuales se encuentran: Fonatur Constructora; Fonatur Infraestructura; y Fonatur Tren Maya (antes Fonatur Operadora Portuaria).
Fonatur Tren Maya tiene su origen en 1969 cuando se constituyó con el nombre de Terrenos Recreo; en 2004 cambió su denominación por la de Singlar S.A. de C.V; así como su objeto social para constituirse en operadora de servicios náuticos, comercializadora y administradora y tuvo a su cargo la operación de las escalas náuticas del Fonatur.
En 2008 se formalizó un tercer cambio de denominación social por la de Fonatur Operadora Portuaria que es poseedora y operadora de dos títulos de concesión para las administraciones portuarias integrales del puerto de Cabo San Lucas, en Baja California Sur y del recinto portuario de Bahías de Huatulco, Oaxaca.
También administra fíjese usted: estaciones de servicios Pemex (gasolineras) en las marinas del Fonatur, campos de golf y dos hoteles en Baja California Sur.
El 30 de noviembre de 2018 la Asamblea General Extraordinaria de Accionistas de Fonatur Operadora Portuaria acordó modificar el objeto y la denominación social de la empresa por la de Fonatur Tren Maya (FTM), lo que le permitiría contar con los elementos para realizar el Proyecto Tren Maya en la administración federal.
El proyecto de origen se asignó a FTM, pero al no contar con la capacidad requerida para su desarrollo, éste suscribió con Fonatur (el 3 de enero de 2019) un convenio de colaboración, con vigencia indefinida para el cumplimiento de su objeto, el cual consistió en determinar las bases de coordinación bajo las cuales dichas entidades colaborarán para la implementación del Proyecto Tren Maya.
Es decir, nadie sabía quién iba a contratar a empresas de manera legal ¿FTM o Proyecto Tren Maya?
Dicho convenio se estableció que el Fonatur realizaría las acciones tendientes a la implementación del Proyecto Tren Maya hasta la fecha en que FTM contara con una estructura administrativa y orgánica, así como con recursos presupuestales y que Fonatur implementaría las acciones tendientes a la contratación de los servicios que se requieran para la realización de la etapa inicial del Proyecto Tren Maya.
Al amparo de este convenio el FTM pudo proponer a Fonatur esquemas que permitan la participación directa de terceros y que en etapas subsecuentes formarían parte del desarrollo del Proyecto Tren Maya.
Aun así, comenzó a fluir el dinero público. De conformidad con el documento Ingresos de Flujo de Efectivo de la Cuenta Pública 2019 de Fonatur, éste obtuvo 2,378,352.8 miles de pesos en 2019, integrados por 434,787.0 miles de pesos por venta de bienes y servicios e ingresos diversos, y 1,943,565.8 miles de pesos por subsidios y apoyos fiscales.
Al respecto, esa entidad proporcionó la base de datos denominada “Flujo de Efectivo 2019” en la cual informó que obtuvo ingresos por subsidios y apoyos fiscales por 708,140.3 miles de pesos, que se aplicaron para el Proyecto Tren Maya, el 36.4% de los 1,943,565.8 miles de pesos de ingresos por subsidios y apoyos fiscales, integrados por tres tipos de aportaciones y por centro de costo.
Hoy se sabe que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) emitió la “promoción de responsabilidad administrativa sancionatoria” para que el Órgano Interno de Control del Fonatur Tren Maya o su equivalente, realizara las investigaciones pertinentes y, en su caso, inicie el procedimiento administrativo correspondiente por las irregularidades de los servidores públicos que en su gestión suscribieron diversos contratos.
Los detectado fueron el contrato con número FTM/CORP/AD/018/19 con R&M Rent-A-Max S.A; 056/2019 con Seguros Inbursa y Grupo Financiero Inbursa; el 077/2019 con Tayira Travel, S.A. de C.V; y el 085/2019 con Si Vale México, S.A. de C.V.
También están los contratos FTM/CORP/AD/003/19, FTM/CORP/AD/015/19 y FTM/CORP/AD/014/19 con Fonatur Infraestructura; así como CODC/0J1/212/2019 con la Universidad Nacional Autónoma de México.
Todos ellos fueron adjudicados sin que se encontraran previstos en el Programa Anual de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios de 2019 del Fonatur Tren Maya en incumplimiento de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público.
Así solo parte de cómo operaron para la contratación de empresas. Vacíos legales muy detectables, funcionarios que contrataron servicios y no se sabe quién, y sobre todo, dinero del erario que se extravió y jamás se va a recuperar. Así la construcción del Tren Maya.