Ciudad de México.- Luego de una caída significativa en periodo pandemia, el 2022 ha traído una recuperación del factoraje financiero y, al cierre del segundo trimestre del año, 263 mil 868 millones han financiado diversas operaciones empresariales.
Por medio del factoraje, cientos de entidades públicas y privadas comercializan sus cuentas por cobrar, obteniendo así liquidez casi inmediata, ya que con este producto financiero se puede obtener hasta el 90% del capital que aún no llega a su operación.
“El factoraje financiero es una alternativa que permite disponer anticipadamente de las cuentas por cobrar, de esta manera una empresa obtiene la liquidez que requiere para fortalecer su negocio; es decir, dispone de inmediato de efectivo para hacer frente a sus necesidades y obligaciones o bien realizar inversiones, una actividad sin duda clave para el fortalecimiento del negocio en un escenario económico complejo”, detalló Pilar Turanzas, presidente de la Asociación Mexicana de Factoraje Financiero y Actividades Similares (AMEFAC).
Factores como disrupciones de cadenas globales, conflictos geopolíticos y los ajustes a las tasas de referencia de los principales bancos centrales, han influido de manera constante en la economía mexicana y por ende en el comportamiento del uso del factoraje.
Este producto se vuelve un complemento para las empresas pues el mercado de proveeduría opera a pagos en plazos, una situación compleja para el sector empresarial desde el 2020 y hasta la fecha.
“De acuerdo con cifras reportadas por parte de los socios de la AMEFAC, el factoraje financiero tiene una cartera vencida menor al 2%. Lo que se convierte en un indicador de lo favorable que puede ser para las empresas contar con liquidez que les permita crecer y enfrentar gastos futuros”, informó Pilar Turanzas.
La presidenta de la AMEFAC destacó que, aún con los comportamientos dinámicos de la economía en México, se espera que en este 2022 el factoraje coloque un volumen por, al menos, los mismos niveles que en el 2021 (546,213 millones de pesos al cierre del año).
Lo anterior debido a que la digitalización de procesos, un mayor conocimiento del producto, la necesidad de capitalización inmediata de las empresas y una creciente cercanía con las Fintech; son situaciones que se afianzan cada vez más.
De acuerdo con la Asociación Latinoamericana de Factoring (FELAFAC), México es el tercer país de LATAM (sólo después de Chile y Brasil) con más volumen de colocación de capital por medio del factoraje en México.
La Asociación Mexicana de Empresas de factoraje nació en 1988 con el fin de promover el sano desarrollo de la actividad del factoraje financiero del país, pero, sobre todo, para respaldar la figura del factoraje y lograr que cada vez más empresas tengan acceso y exploten este tipo de alternativas.
Actualmente la AMEFAC está integrada por 17 asociados, 15 instituciones financieras (bancos) y 2 SOFOMES; las cuales en conjunto operan el 90% del factoraje que se realiza en México.
Relevancia del factoraje financiero:
- Es una herramienta que está al alcance de cualquier empresa, independientemente del tamaño de la misma.
- Ofrece tasas de interés muy competitivas y en algunos casos suelen ser más bajas que las que pueden obtener las empresas pymes y PEFAES (personas físicas con actividad empresarial) por medio de un crédito tradicional.
- Entre los principales factores por los cuales hemos se ha visto un crecimiento del factoraje en México, se encuentra la necesidad de liquidez que requieren las empresas.