Ciudad de México.- El nombrado titular de la Secretaría de Hacienda Público (SHCP), Arturo Herrera Gutiérrez, sostuvo que durante su gestión no cambiará la conducción responsable de la política fiscal y la estabilidad macroeconómica, pero en esta nueva responsabilidad él solo cambiará el estilo.
“Lo que sí cambia y cambia con todas las personas que tienen una responsabilidad es un estilo; yo quiero tener un estilo abierto, franco y transparente de comunicación con todos los actores relevantes en la economía, con los actores sociales, con los medios, con los mercados financieros, con las calificadoras, pero también y de manera relevante, con los miembros del Congreso”.
Así lo dijo en reunión con integrantes de la Comisión de Hacienda y Crédito Público de la Cámara de Diputados, quienes someterán a votación y, en su caso, aprobarán el dictamen de la propuesta de ratificación de su nombramiento como titular de la SHCP, tras la renuncia al cargo el 9 de julio pasado de Carlos Urzúa, argumentando discrepancias en materia económica e “inaceptable al imposición de funcionarios” sin conocimiento.
Herrera Gutiérrez consideró que se debe estabilizar el ritmo de crecimiento de deuda, fortalecer las fuentes de ingreso, tener racionalidad en la aplicación del gasto y un combate decidido a la corrupción, porque “los pocos recursos que tenemos no podemos permitir que se gasten mal, por eso la política de austeridad”.
México, indicó, enfrenta problemas estructurales de largo plazo, como el bajo crecimiento de los últimos 40 años, pero también hay problemas coyunturales o “nubarrones”, como la desaceleración de la economía global, problemas geopolíticos y las tensiones comerciales que se han venido dando en los últimos meses.
Ante ello, apuntó el propuesto secretario de Hacienda, hay que reflexionar sobre lo que pasa en la economía mexicana y asegurar que se tienen los elementos de defensa en un contexto de incertidumbre internacional.
Resaltó que ahora también “toca apoyar” a Petróleos Mexicanos (Pemex) porque es una de las principales fuentes de empleo del país y uno de los activos económicos y financieros, para asegurar que recupere sus niveles de producción.