California.- La fabricante de chips Intel Corp recortó su pronóstico de ingresos para el 2022 por segunda vez este año, ya que la caída en la demanda de computadoras personales se está agravando y los temores de recesión enturbian las perspectivas para el mercado de centros de datos.
La escalada de la inflación ha llevado a los consumidores a reconsiderar la compra de computadoras y de otros dispositivos, lo que ha obligado a las empresas de productos electrónicos a cancelar los pedidos de componentes como chips, en su urgencia por liquidar el inventario.
Los envíos de computadoras personales se hundieron un 15.5% en el tercer trimestre, según mostraron datos de Counterpoint Research. La firma de investigación espera un descenso del 13% para todo el año, por encima la estimación de Intel de una caída de alrededor del 10%.
Los fabricantes de chips también se han visto presionados por la preocupación de que la amenaza de una recesión global pueda incitar a los clientes del mercado de centros de datos a reducir sus gastos.
La utilidad neta para el tercer trimestre finalizado el 1 de octubre fue de 1,020 millones de dólares, o 25 centavos por acción, frente a una ganancia de 6,820 millones de dólares, o 1.67 dólares por acción, en el mismo periodo del año anterior.
La compañía ahora espera ingresos anuales de entre 63,000 millones de dólares y 64,000 millones de dólares, frente al rango previo de una facturación de entre 65,000 millones y 68,000 millones de dólares. La previsión inicial llegaba a unos 76,000 millones de dólares.
Analistas, en promedio, proyectaban ingresos anuales de 65,260 millones de dólares, según datos de Refinitiv.