Ciudad de México.- El secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade Kuribreña, planteó, ante el Pleno de la Cámara de Diputados, que el Paquete Económico 2018 exige ajustes para complementar con recursos los mecanismos de administración de riesgos, frente a las contingencias del mes septiembre, respetando el principio de responsabilidad fiscal, “ya que de hacerlo de forma distinta abonaría calamidades financieras a las naturales”.
En el marco de la Glosa del Quinto Informe de Gobierno y del análisis del Paquete Económico 2018, y luego de rendir protesta de decir verdad, el funcionario dijo que no será la primera vez que se requieran ajustes. “Siempre lo hemos logrado en unidad y respetando el principio de no legarle los costos de la reconstrucción a otras generaciones; lo hemos hecho, asumiendo los compromisos de consolidación y de responsabilidad fiscal”.
En cuanto a la glosa, subrayó que pese a las adversidades y a un entorno poco favorable, “México crece”. Es un crecimiento balanceado, resistente y cuyos beneficios llegan a un número mayor de mexicanos. El entorno económico en algunos casos empieza a mejorar; “nuestra economía acumula 30 trimestres consecutivos de crecimiento positivo”.
En la última década, agregó, se ha logrado un crecimiento de 22 por ciento y, si se considera el punto más bajo después de la crisis de 2008, la economía es 29 por ciento más grande. La expectativa al cierre de 2017 es 30 por ciento superior a lo que era a principios de año.
Este crecimiento descansa en un vigoroso mercado interno que se refleja en un consumo privado y ventas al menudeo. Al sólido desempeño se suma la recuperación de la demanda externa. En los primeros ocho meses de 2017, el monto de las exportaciones creció un 10.1 por ciento anual.
El titular de la SHCP señaló que hoy son 2.2 millones menos en pobreza extrema que al principio de la administración. En 2015, cuatro de cada 10 pesos del gasto social se destinaban a programas prioritarios. Hoy la propuesta es asignarles siete de cada 10 pesos.
Indicó que la reforma hacendaria y los esfuerzos de la administración tributaria fortalecieron y despetrolizaron las finanzas públicas. A principios de esta administración, de cada 100 pesos de ingresos públicos, casi 40 provenían del petróleo, hoy son solo 16.
Resaltó que el porcentaje de deuda a ingresos tributarios es 20 por ciento inferior que hace cinco años. El Paquete Económico aprobado el año pasado refleja esta mejora y, aunado a un esfuerzo de contención del gasto, permitirá por primera vez, desde 2008, tener un superávit primario; esta meta habrá de alcanzarse aún sin incluir el remanente de operación del Banco de México.
Comentó que al final del año la deuda será de 48 por ciento del PIB. Es la primera vez en una década que la relación entre ambos factores se reduce.
Destacó que el Paquete Económico está basado en conceptos como estabilidad, certeza y sensibilidad social. No se incluye ninguna modificación ni ningún impuesto nuevo y los programas sociales prioritarios se mantienen en sus términos. No habrá un solo beneficiario del padrón que se vea afectad, aseguró.
Por otra parte, apuntó, incorpora un anexo transversal que permita dar seguimiento al Sistema Nacional Anticorrupción y se fortalecen los programas de seguridad nacional pública.
Se mantiene el financiamiento de los proyectos estratégicos de infraestructura y se impulsan alianzas con el sector privado para detonar inversión.
El funcionario reiteró su disposición de acompañar el proceso de análisis de la soberanía legislativa para dar al Paquete Económico pertinencia y vigencia en el 2018. “Recordemos que más allá de números y proyecciones, hay rostros y vidas que esperan alivio”.
“Nos tocará juntos, reiterando nuestro compromiso de diálogo y acompañamiento, hacer que el Paquete ayude a recuperar esperanza y dar certeza a todos aquellos mexicanos que fueron afectados por los desastres naturales”, expresó.
En los posicionamientos, el diputado Jorge Estefan Chidiac (PRI) reconoció que a semanas de haber tomado protesta como secretario de Hacienda, Meade Kuribreña, enfrentó la turbulencia del efecto de Donald Trump, de los mercados cambiarios y la posible baja de la calificación del país.
“México no ha tropezado, está de pie y creciendo, y esto es consecuencia de no ceder al fácil y peligroso discurso del populismo, sino a la determinación del gobierno por realizar reformas estructurales y hacer bien las cosas. Por actuar con responsabilidad y ser consistente en mantener la calidad económica y fiscal”, subrayó.
Manifiesto su total voluntad de hacer todas las reasignaciones que sean necesarias para sacar un buen Paquete Económico 2018. “No seremos los que provocaremos en esta Cámara una ruptura política ni una falta de diálogo. En estas reasignaciones mantenemos nuestra voluntad de hacer las necesarias y así apoyar a los conciudadanos que sufrieron con los sismos. No regatearemos ningún centavo del presupuesto para atender los desastres naturales y apoyar a los mexicanos afectados por ellos”.
Marko Cortés Mendoza, diputado del PAN, externó su preocupación de que siga aumentando irresponsablemente la deuda del país, las tasas de interés, la corrupción, la impunidad, y que el peso siga con inestabilidad frente al dólar y se gaste más de lo presupuestado.
“Nos preocupa un presupuesto inercial que propone lo mismo y seguramente tendremos el mismo resultado. Es necesario corregir la propuesta del Paquete Económico, reducir el ISR, eliminar gastos superfluos, frenar el alza en las gasolinas, limitar reasignaciones presupuestales, simplificar el pago de impuestos”.
Se manifestó por crear el Fondo Nacional para la Reconstrucción, el cual permita una contraloría ciudadana que pueda vigilar el correcto gasto. “Tenemos que lograr que el recurso para los damnificados llegue realmente a las manos de quienes lo necesitan. Nuestro enemigo es la pobreza, desigualdad e inseguridad. Vemos que por la difícil competencia política, el Poder Ejecutivo ha dejado de hablar con la oposición del Poder Legislativo. Es necesario volver a dialogar”.
Del PRD, el diputado Francisco Martínez Neri resaltó que el Paquete Económico 2018 no resuelve los retos nacionales, por lo que debe ser modificado. Añadió que la crisis económica y social que actualmente se padece, hace más evidente el fracaso de este gobierno, pues se inició con una deuda del 37 por ciento del PIB, y en 2017 llegó al 50 por ciento, pero el crecimiento económico alcanzó el 3 por ciento.
“Estos indicadores permiten calificar a esta administración como fallida, a ello se le suma una galopante corrupción”, sostuvo.
Puntualizó que los apoyos a los damnificados son una verdadera burla. “No insultemos a la gente, 120 mil pesos no alcanzan, son ridículos, son una afrenta. Dudamos que los 38 mil millones de pesos sean suficientes para que se reconstruyan centenas de viviendas, mercados, bibliotecas y la infraestructura hidráulica, carreteras y servicios públicos. Se requieren medidas reales de alivio fiscal a los damnificados para proteger a las clases populares y medias, y que se prorrogue el régimen de transición en materia de disciplina financiera por un año.
El diputado Juan Romero Tenorio (Morena) resaltó que no hay crecimiento económico, no se percibe en la calidad de vida de los mexicanos, “día a día millones tienen que batallar por sobrevivir en una hacienda informal, llena de corrupción y sin competitividad para aquellos sectores que pueden tener actividades industriales o comerciales. No hay certeza en la actividad económica, no solamente por las macrocifras sino porque no hay seguridad pública para los ciudadanos, cualquiera está expuesto a secuestro o extorsión”.
Acusó que esta Cámara de Diputados, en forma artificial e irresponsable, autoriza deuda pública y la oculta. “Estamos creciendo con deuda, una histórica de la cual aquí no se ha revisado y de la cual aquí no nos hemos hecho responsables; queríamos que nos explique la secretaría, porque en el informe no está, pues no sabes a dónde se destina, quién la gasta y quién se beneficia”.
Emilio Enrique Salazar Farías, diputado del PVEM, mencionó que en el país se crece de manera sostenida; por primera vez se tiene un superávit primario, producto de la austeridad y buen manejo de las finanzas. Hoy los ingresos no son petroleros, dependen de la recaudación fiscal, las exportaciones crecen y hay más empleo, por lo que “la estabilidad económica del país no está comprometida, está asegurada a largo plazo y eso se ha hecho con gran responsabilidad”.
Modificar el decreto sobre repatriación de capitales, dijo, ha permitido que regrese el dinero que mexicanos tenían en el extranjero para reinvertirlo en el país bajo condiciones favorables y recalcó el anunció de la SHCP de que hay dinero suficiente en el Fonden, más los seguros, más el bono catastrófico de 150 millones de dólares para atender las recientes emergencias naturales.
Por MC, Clemente Castañeda Hoeflich preguntó por qué no se cumplieron las expectativas de crecimiento económico, las metas del combate a la pobreza y a la desigualdad, y por qué se rompió el record histórico de endeudamiento. “Estamos convencidos de que el crecimiento de la economía, la generación de empleos e inversiones, pasan por una profunda reestructuración del gasto público. Acabar con el derroche de recursos, hoy es un deber para reconstruir a México, pero también una condición para recuperar la confianza de los ciudadanos y hacerle frente a los retos del país”.
Externó su preocupación sobre las garantías que tienen los mexicanos de que el dinero para atender la emergencia a causa de los fenómenos naturales llegue a quienes lo necesitan, que no será utilizado de manera discrecional desde su programación hasta su ejecución y que este dinero no termine reasignado unilateralmente por el gobierno federal, en rubros como publicidad gubernamental, dádivas o “la compra de conciencias”.
El diputado Luis Alfredo Valles Mendoza (NA) indicó que en los últimos años la estabilidad macroeconómica de México se ha mantenido; el crecimiento económico ha sido moderado y una eventual crisis económica de fin de sexenio luce poco probable. No obstante, las carencias que viven diariamente millones de mexicanos y los daños ocasionados por los eventos naturales recientes, hacen necesario acelerar y homogeneizar el desarrollo económico.
Cuestionó cómo se planea afrontar esta situación fiscal, tributaria y presupuestaria contingente, ante un escenario de mayores necesidades económicas, derivadas de los sismos, de la restricción de no incrementar la deuda pública ni cambiar las tasas contributivas. La fortaleza financiera, añadió, consiste en seguir formalizando la base de contribuyentes, fomentar una distribución equitativa de la riqueza y encontrar mecanismos alternos de inversión, así como castigar todos los actos de corrupción que dañen las arcas públicas.
Alejandro González Murillo, diputado del PES, se manifestó por tener estabilidad económica, certeza y sentido social, y que los tres Poderes de la Unión “estemos dispuestos a apretarnos el cinturón por igual. Otra respuesta es inadmisible. Debemos velar por atender las necesidades de las familias afectadas. No podemos bajar la guardia en las acciones ya emprendidas para impulsar el desarrollo del país, tampoco debemos enviar mensajes demagógicos y huecos con visión electorera a la sociedad”.
Hizo votos para que el debate en torno al Presupuesto de Egresos de la Federación 2018 “se despoje de demagogia e intereses electoreros” enfocándose en el bienestar social y el mejor diseño y ejercicio del gasto público. Externó su preocupación sobre las acciones para mantener los empleos formales, que sean bien remunerados y continuar con la línea de crecimiento, y las fronteras y vida de los migrantes.