Londres.- l petróleo prolongaba su desplome este miércoles, perdiendo un 5% y tocando un mínimo de más de un año, ya que la inquietud por Credit Suisse asustaba a los mercados mundiales, contrarrestando las esperanzas de una recuperación de la demanda petrolera china.
Las primeras señales de un regreso a la calma y la estabilidad se desvanecieron después de que el mayor inversor de Credit Suisse dijera que no podía proporcionar más asistencia financiera a la entidad helvética, provocando la caída de sus acciones y de otros valores europeos.
«Los temores de contagio claramente están ganando terreno», dijo a Reuters Tamas Varga, de la correduría PVM. «Como resultado, el dólar está más fuerte y las acciones se están debilitando: malos augurios para el petróleo».
Los temores de que las dificultades del sector bancario provoquen una recesión económica mundial derrumbaron este miércoles las cotizaciones del petróleo a su nivel más bajo desde diciembre de 2021. Hacia las 15:00 GMT, el barril del crudo estadounidense West Texas Intermediate en (WTI) caía 5.40%, hasta los 67.47 dólares, y el de Brent, de referencia en Europa, se hundía 5.06%, para colocarse en los 73.53 dolares.
«Credit Suisse y los temores bancarios más amplios están pesando mucho en la confianza», dijo a Reuters Craig Erlam, de la correduría OANDA. «El panorama es de repente muy incierto y eso está golpeando los precios del petróleo a corto plazo».
El petróleo había subido más temprano tras cifras que mostraron que la actividad económica de China repuntó en los dos primeros meses de 2023, ya que el consumo y la inversión en infraestructuras impulsaron la recuperación tras el fin de las estrictas medidas contra el Covid-19.
El martes, ambos referenciales cayeron más de 4%, a mínimos de tres meses, presionados por el temor a que la quiebra del Silicon Valley Bank y otros colapsos bancarios en Estados Unidos pudieran desencadenar una nueva crisis financiera que lastrara la demanda de combustible.
Este miércoles, el más reciente informe mensual de la Agencia Internacional de la Energía dio respaldo al mercado, ya que apuntó a un próximo aumento de la demanda de petróleo por parte de China, mientras que un día antes la OPEP aumentó su previsión de demanda china para 2023.