Piden diputados aumento de salario mínimo que cubra necesidades mínimas

El diputado Arturo Santana Alfaro (PRD) afirmó que el incremento salarial anunciado por la Consami de 8 pesos diarios, “es oprobioso para la clase trabajadora”

1079

Ciudad de México.- La Cámara de Diputados exhortó al gobierno federal y a la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami), para que consideren un incremento al salario mínimo que cubra las necesidades básicas establecidas en la Constitución Política, a aplicarse a partir del primero de enero de 2018, y se convoque a todos los sectores participantes como sindicatos y gremio patronal.

Durante la sesión de hoy, el diputado Arturo Santana Alfaro (PRD) afirmó que el incremento salarial anunciado por la Consami de 8 pesos diarios, “es oprobioso para la clase trabajadora”, y consideró que “se está a tiempo para reivindicarse”.

El acuerdo publicado en la Gaceta Parlamentaria refiere que el 21 de noviembre el Consejo de Representantes de la Consami resolvió “revisar el monto actual del salario mínimo general donde menciona un aumento salarial pasando de $80.04 a $88.36”.

En los considerandos el punto de acuerdo plantea que “llevar a 100 pesos el salario mínimo en noviembre de 2017 sería un paso en la Nueva Cultura Salarial, una evolución progresiva de los sueldos que, preservando la estabilidad, induzca al crecimiento económico y al desarrollo social”.

La viabilidad de la economía de mercado con estabilidad social en el mediano y largo plazo, solo es posible si amplios sectores de la población encuentran en ella una vida digna. “Apostarle a la pobreza permanente y al crecimiento de la desigualdad, en realidad es apostar contra la economía del mercado y la libertad”, subraya el documento.

Frente al aumento decretado, el legislador expresó que los tres millones de empleos creados en esta administración serán mal pagados, por lo que llamó a revisar el aumento, y decretar un ajuste que recupere el poder adquisitivo y alcance la línea de bienestar propuesta por el Coneval.

“No es menor el oprobio, el agravio que se genera con esta simulación de incremento. Al Presidente se le fue la última oportunidad para reivindicarse con la clase trabajadora. Pero estamos a tiempo para que la Conasami rectifique este incremento salarial ofensivo”, enfatizó Santana Alfaro.

Se pronunció por desaparecer a la Conasami, dado que “hay gran inconformidad” con ella y se cree un nuevo instituto, autónomo, que fije los salarios mínimos.

La diputada Rosa Alba Ramírez Nachis (MC) afirmó que el salario mínimo ha sido una “aberrante y despojante” condición de dignidad de los trabajadores que sostienen al país, que dan vida a las instituciones, y “mantienen a los diputados y a los integrantes de la Conasami, que lo único que hace es sesionar para seguir agravando y ahondando el dedo en la llaga de los trabajadores”.

Dijo que la desigualdad salarial en este país es realmente lastimosa, pues ninguno de los integrantes de la Conasami percibe el equivalente a un salario mínimo, pues cada uno de sus directivos “gana arriba de 119 mil pesos. Esa es la realidad de los que se dedican a incrementar esta miseria en los salarios mínimos”.

La diputada Yaret Adriana Guevara Jiménez (PVEM) apuntó que el ajuste anual del salario mínimo se ha convertido en una oportunidad para que, “mediante propuestas demagógicas, se busque obtener un beneficio político”. Manifestó su voto en contra de la proposición, pues plantea, de modo irresponsable, un incremento arbitrario al salario, sin considerar las consecuencias que acarrearía.

Su elevación “fuera de toda racionalidad y sustento económico” provocaría el alza en costos de producción de bienes finales y derivaría en un encarecimiento generalizado de precios, lo que neutralizaría el incremento. “Aprobar aumentos arbitrarios al salario mínimo sería insuficiente y terminaría por no cumplir con su objetivo primario de cubrir las necesidades de la familia”.

El diputado Roberto Alejandro Cañedo Jiménez (Morena) dijo que el aumento anunciado “equivalente al 10.40 por ciento, es raquítico”, y consideró que el gobierno federal justifica con “cinismo” su insuficiencia, supuestamente, para llevar una política económica adecuada.

De acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), para comprar una canasta básica alimentaria se requieren 94 pesos, más que los 88 que proponen, por lo cual el aumento resulta, en obvias condiciones, insuficiente. “Hasta los empresarios consideraron que el incremento es un avance limitado, pues la expectativa debe alcanzar los 95 pesos, cifra con la cual se empataría la línea de bienestar”.

El diputado Julio Saldaña Morán (PRD) llamó a todas las fracciones parlamentarias a generar buenos salarios, justos, pidió “corregir este error, porque es una burla que hacen a la clase trabajadora, y solicitó eliminar a la Conasami, que hace más daño que bien”.

Criticó que se haya aprobado un presupuesto millonario para ese organismo y sus once integrantes, con salarios de 173 mil pesos “contra 88 pesos de los trabajadores. No hay vergüenza, debe desaparecer”.