- Trump en busca de la culpabilidad china por Covid-19
- En busca del nuevo equilibrio mundial
- México y la Unión Europea firman nuevo acuerdo
Juan Barrera Barrera
Donald Trump está empeñado en buscar un culpable que pague por las consecuencias causadas por el coronavirus. El candidato indicado es China, no hay otro, pues ahí, en la ciudad de Wuhan se originó el letal virus. Pero el servicio de inteligencia de los Estados Unidos aseguró que no fue creado ni modificado genéticamente.
Sin embargo, aún siguen investigando si la pandemia comenzó por contacto con animales infectados, como se dijo desde el principio, o si el esparcimiento del coronavirus fue el resultado de un accidente de laboratorio en Wuhan. Los resultados de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI) coinciden con la comunidad científica en el sentido de que el Covid-19 no fue creado ni modificado genéticamente por humanos.
Pero el presidente Trump parece que ha asumido el conflicto con China como un asunto personal y hace lo posible por sancionar, con los aranceles, a la segunda potencia económica y militar mundial. A principios de semana dijo que no descartaba reclamar una compensación económica al gigante asiático.
Estados Unidos pierde presencia mundial
A Donald Trump le urge un golpe de suerte en lo externo para contrarrestar las críticas por el pésimo manejo que hizo sobre la expansión de la pandemia desde un principio y que amenaza con extenderse aún más; y cuando siente la presión de los empresarios para levantar la cuarentena y reabrir la actividad económica en contraposición a varios gobernadores que sienten que necesario continuar con el distanciamiento social para evitar una segunda etapa de contagios.
Los números del jueves del FMI indican que la economía estadounidense va a la baja (-4.8% del PIB), en tanto que a la china le fue peor (-6.8%) en el primer semestre del año, pero con la salvedad de que el país asiático volverá a repuntar en el segundo semestre y podría iniciar un crecimiento del 6% anual.
Durante los últimos diez años la economía de Estados Unidos había tenido un crecimiento sostenido y generación de empleos que le permitía a Trump pavonearse ante sus seguidores y lanzar mentiras al grueso de los estadounidenses de las maravillas que ha hecho “el mejor” presidente que ha tenido la potencia.
El que debería preocuparse ahora es Donald Trump porque la Reserva Federal pronostica una mayor contracción económica en el segundo semestre que significará más pérdidas de empleos que hasta ayer la cifra llegaba a los 30 millones de desempleados en tan solo seis semanas.
China busca credibilidad en el nuevo juego geoestratégico
Donald Trump va a la baja en el concierto internacional como la economía de Estados Unidos. El magnate no ha sabido estar a la altura de las circunstancias de una crisis sanitaria global, tampoco nadie se lo esperaba de un mandatario divisivo, mezquino, que ha despreciado los esfuerzo multilateralitas como el mejor mecanismo de cooperación internacional n la solución de los problemas globales.
Las posiciones soberbias del presidente Trump ante el mundo le han restado supremacía, así lo demuestra la respuesta de Washington a la crisis pandémica mundial. Y en lo doméstico, su reelección presidencial ahora más que nunca está en duda.
China, por su parte, tiene que trabajar, porque una buena parte de occidente comparte la teoría de la culpabilidad de Pekín en el brote del nuevo virus, sobre su credibilidad en el nuevo juego geoestratégico para el mantenimiento del nuevo equilibrio mundial.
Listo, nuevo acuerdo México-Unión Europea
La Unión Europea y México han concluido hoy el último elemento que quedaba pendiente en la negociación de su nuevo acuerdo comercial. El comisario de Comercio, Phil Hogan y la secretaria de Economía de México, Graciela Márquez Colín, acordaron, vía telefónica, el alcance exacto de la apertura recíproca de los mercados de contratación pública, así como un alto nivel de previsibilidad y transparencia en los procesos de contratación pública. Con ello, la UE y México pueden avanzar hacia la firma y la ratificación de este acuerdo conforme a sus normas y procedimientos respectivos.
Con el nuevo acuerdo, informó la UE, la totalidad del comercio de mercancías entre la UE y México estará exenta de derechos de aduana. El acuerdo incluye también normas innovadoras sobre desarrollo sostenible, como el compromiso de aplicar efectivamente el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático. Es también la primera vez que la UE acuerda con un país latinoamericano cuestiones relativas a la protección de las inversiones. Con la simplificación de los procedimientos aduaneros contribuirá a impulsar las exportaciones.
El Acuerdo Global más amplio, del que forma parte el acuerdo comercial, abarca también la protección de los derechos humanos y contiene capítulos sobre cooperación política y cooperación al desarrollo. Este será también el primer acuerdo comercial de la UE que incluya disposiciones para combatir la corrupción, con medidas para luchar contra el soborno y el blanqueo de capitales.
México es el primer socio comercial de la UE en América Latina, con un comercio bilateral de mercancías por valor de 66 mil millones de euros y un comercio bilateral de servicios por un valor de 19 mil millones de euros (datos de 2019 y 2018, respectivamente). Las exportaciones de mercancías de la UE superan los 39 mil millones de euros al año. El comercio de mercancías entre la UE y México se ha triplicado con creces desde la entrada en vigor del acuerdo original en 2001. El acuerdo comercial modernizado contribuirá a impulsar este fuerte crecimiento histórico, aseguró la representación diplomática
Actualmente se está ultimando la revisión jurídica del acuerdo. Una vez finalizado el proceso, el acuerdo se traducirá a todas las lenguas de la UE. Cuando se hayan realizado las traducciones, la propuesta de la Comisión será transmitida al Consejo y al Parlamento Europeo para su firma y celebración.