- Acertado relevo en la SRE: Alicia Bárcena, gran latinoamericanista
- Larga y fructífera carrera en las Naciones Unidas
- Desigualdad y desarrollo asociados a la sustentabilidad, su preocupación
- En la CEPAL tuvo una” Gestión progresista y visionaria”: Guterrez
Juan Barrera Barrera
Alicia Bárcena Ibarra ha tenido una carrera diplomática muy productiva. Ello ha sido gracias principalmente a su esfuerzo y capacidades personales. Es de esas personas que no gusta, eso creo, de los reflectores, de los protagonismos. Su trayectoria tal vez para muchos ha pasado en silencio hasta que fue nombrada Secretaría Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Estudio Biología en la Facultad de Ciencias de la UNAM. Entre 1982 y 1986 fue Subsecretaria de Ecología en la recién creada Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología, de la cual fue titular Manuel Camacho Solís (1986-1988), mentor político de Marcelo Ebrard. De 1989 a 1992 dirigió el Instituto Nacional de Pesca. En esos años no era muy común que cargos de esa naturaleza fueran ocupados por una mujer. Eran tiempos en que la equidad de género estaba todavía lejana.
Su participación en el Comité de Lucha de la Facultad de Ciencias en 1971 para analizar la represión del 10 de junio de ese año contra el movimiento estudiantil a manos de los Halcones (eran tiempos de la guerra sucia), sin duda fue una gran experiencia, muy amarga, no obstante, pero le sirvió para la toma de conciencia y sustancialmente en su formación para entender la realidad política y social del país.
Bárcena Ibarra, de 71 años, realizó una maestría en Administración Pública en la Universidad de Harvard. En sus diversos cargos públicos y diplomáticos que ha ocupado ha enfocado su actividad profesional en temas relacionados con el desarrollo sostenible, el medio ambiente y el cambio en el desarrollo económico en Latinoamérica y el Caribe.
A principios de semana fue nombrada nueva secretaria de Relaciones Exteriores de México en sustitución de Marcelo Ebrard Casaubon, quien es uno de los seis funcionarios que se separó de su cargo (la cancillería) para hacer proselitismo en busca de ganar la encuesta que definirá al candidato(a) de Morena a la presidencia de la República.
¿Sorprendió su nombramiento? Algunos analistas pensaban en el embajador de México ante las Naciones Unidas, Juan Ramón de la Fuente, quien está realizando un excelente trabajo ante ese organismo multilateral, y también en el embajador de México en Washington, Esteban Moctezuma que ha tenido un papel discreto en esa representación, entre otros.
Una larga carrera de retos y grandes logros en la ONU
El primero de abril terminó una carrera de 26 años al servicio de las Naciones Unidas al dejar la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL. Previamente se desempeñó como Secretaria General Adjunta de Gestión de la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, y cumplió tareas como Jefa de Gabinete y como Jefa Adjunta de Gabinete de Kofi Annan, entonces secretario general de la ONU.
En la CEPAL ocupó el cargo de secretaria Ejecutiva Adjunta y Directora de la División de Medio Ambiente y Asentamientos Humanos, En la ONU fue Coordinadora del programa de desarrollo sostenible de américa latina y del Caribe del programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). Además, fundó y dirigió el Consejo de la Tierra, organización no gubernamental con sede en Costa Rica.
En julio de 2008 el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon la nombró Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), cargo que dejo en marzo de 2021 y de ahí saltó a la embajada de México en Chile, en donde estará hasta finales de mes para después asumir las responsabilidades de la cancillería.
Impuso su ideario progresista en la CEPAL
Luego de gestión marcados por la impronta de la igualdad y su incidencia clave en el proceso de desarrollo de los países y el progreso humano, la diplomática mexicana expresó: “Concluyo hoy este ciclo fecundo…Ha sido esta la etapa más luminosa de mi trayectoria profesional. Durante 14 años he contribuido a dar peso, influencia y oportunidad al cuerpo de convicciones transformadoras, progresistas e igualitarias que distinguen el presente del pensamiento cepalino”
En ese periodo la CEPAL tuvo un prolífico periodo en el que Bárcena Ibarra, la primera mujer en encabezar al organismo, impulsó un ideario progresista para la región que tiene como un gran reto superar las trabas estructurales que han frenado el avance democrático profundo y el progreso material y cultural de América Latina y el Caribe.
Desde que tomó las riendas de la CEPAL, la latinoamericanista destacó el papel central de la igualdad para el fortalecimiento de un estilo de desarrollo que conjugue crecimiento económico, inclusión social y sostenibilidad ambiental, enfoque que quedó plasmado en documentos trascendentales como “La hora de la igualdad: brechas por cerrar, caminos por abrir (2010) y “Construir un nuevo futuro: una recuperación transformadora con igualdad y sostenibilidad” (2020), entre otros.
En estos documentos se refleja fielmente el ideario social de Alicia Bárcena enfocado a los derechos de la ciudadanía, de un Estado de Bienestar Social y de importantes mejoras en la distribución del ingreso, basados en un continuo aumento en la productividad por medio de una macroeconomía para el desarrollo y políticas de transformación productiva y exportadora, pero respetando la sostenibilidad ambiental.
Plan integral migratorio, uno de sus principales legados
Es de destacar que entre el vasto legado de Bárcena Ibarra se cuenta El Plan de Desarrollo Integral para El Salvador, Guatemala, Honduras y el sur-sureste de México, como una apuesta para abordar las causas estructurales de la migración, que a su vez el gobierno de López Obrador lo asumió como uno de sus temas prioritarios.
El secretario General de la ONU, António Guterres delinea con precisión el ideario social de la autora de El imperativo de la igualdad: por un desarrollo sostenible en América Latina y el Caribe afirmando que Bárcena “encabezó una gestión progresista y visionaria. Fue una de las primeras en la ONU en colocar la igualdad de género, como piedra angular del desarrollo sostenible y en destacar los desafíos específicos de los países de ingresos medios”.
Alicia Bárcena siempre puso el tema de la igualdad en el centro, porque es la que define a la región Latinoamericana -la más desigual del mundo-, afirmaba, donde el 10% más rico recibe el 55% del ingreso y donde 104 individuos concentran una riqueza equivalente al 11% del PIB regional.
En año y medio la nueva canciller demostrará sus capacidades de diálogo y negociación. Le tocará enfrentar la campaña electoral de Estados Unidos y, por lo tanto, los ataques de los republicanos hacia los migrantes y hacia México, una bandera de campaña muy redituable. La diplomática es inteligente y su nombramiento ha sido un gran acierto.
