Ciudad de México.- Los precios mundiales de los alimentos bajaron en julio por segundo mes seguido, reflejando caídas en cereales, aceites vegetales y productos lácteos, pero siguen un tercio más altos respecto al mismo mes de 2020, dijo el jueves la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
El índice de precios de la FAO, que mide las variaciones mensuales para una canasta de cereales, oleaginosas, productos lácteos, carnes y azúcar, promedió 123.0 puntos el mes pasado frente a la cifra de junio de 124.6. En la comparación interanual, los precios subieron un 31.0 por ciento.
La medición había disminuido en junio por primera vez en un año, marcando una pausa en un repunte generalizado de los productos básicos agrícolas impulsado por los retrocesos en las cosechas y la demanda alentada por China.
El índice de precios de cereales cayó un 3.0% en julio con respecto al mes anterior, lastrado por una caída del 6% en los precios del maíz.
Los precios del maíz se vieron presionados por la mejora de las perspectivas de producción de Argentina y Estados Unidos y la cancelación de los pedidos de importación de China, lo que sobrepasó las preocupaciones sobre la cosecha en Brasil, dijo la FAO.
Los precios del aceite vegetal cayeron un 1.4% frente a junio a un mínimo de cinco meses, ya que un repunte en las cotizaciones del aceite de palma se vio compensado por los niveles más bajos de otros aceites.
El índice de azúcar aumentó un 1.7%, registrando un cuarto aumento mensual consecutivo con el apoyo de los precios del petróleo crudo más firmes y la incertidumbre sobre el impacto de las heladas en los rendimientos de Brasil.
La medición de la carne tuvo un alza marginal. Los precios de las aves de corral aumentaron de manera más pronunciada debido a las fuertes importaciones en el este de Asia, mientras que los precios de la carne de cerdo bajaron en medio de una disminución de las importaciones chinas, dijo la FAO.
La agencia no actualizó sus previsiones de oferta y demanda mundial de cereales. El mes pasado, proyectó que las existencias mundiales de cereales en 2021/22 aumentarían por primera vez desde 2017/18.